Xalapa, Ver.- El jardín de niños “José María Morelos y Pavón” tiene daños estructurales, situación que mantiene preocupados a los padres de familia, así como al mismo personal que labora en la institución.

Por ello, -en una acción de protesta pacífica- se llevó a cabo la manifestación la mañana de este miércoles 24 de septiembre frente al plantel para exigir la reparación inmediata del inmueble, el cual, presenta severas afectaciones que ponen en riesgo a la comunidad escolar que cuenta con 72 alumnos.

El preescolar, ubicado en la calle Francisco Javier Clavijero, en el centro de Xalapa, muestra deterioro acumulado reflejado en goteras constantes, grietas en muros, pisos levantados y filtraciones que se agravan durante la temporada de lluvias. 

Las madres advierten que estas condiciones podrían derivar un colapso parcial del edificio, si no se atienden de manera urgente. Así que hicieron el llamado a la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) para que atienda y resuelva el problema.

“No está apta para los alumnos y poco a poco nos fuimos enterando de las afectaciones que tienen las aulas.  Los riesgos son cada vez más rojos pues hay un árbol que puede caer.

Entre las cartulinas que portaron los manifestantes se leían consignas como "tomada bajo protesta", mismas que fueron colocadas en la entrada principal del plantel escolar. 

Los familiares señalaron que el mantenimiento ha sido nulo durante al menos una década, y que no existe claridad sobre cuándo fue la última intervención oficial en el inmueble, por ello, piden que se lleven a cabo los trabajos.

TOMAN PREESCOLAR EN XALAPA

La protesta busca visibilizar el abandono en el que se encuentra el plantel y exigir a las autoridades educativas estatales que se realice una evaluación técnica, que emprendan obras necesarias para garantizar la seguridad de los estudiantes y personal docente.

Una de las madres explicó que al inicio del ciclo escolar 2025 – 2026, les fue informado que la escuela tiene afectaciones, y fue hasta apenas el martes 23 de septiembre que iniciaron algunas maniobras.

Al comenzar con los trabajos, que tendrán duración de al menos seis meses, piden que las intervenciones no sean sólo superficiales.

Además, piden que se les asigne un espacio alterno para que los menores de edad no estén entre materiales o llegue a ocurrir algún accidente, ya que temen por la seguridad de los estudiantes.

(AA)