• Periodismo

Fallece Myriam Serrano, reportera atropellada por camión en Veracruz

  • Iraís García
La periodista fue atropellada por un camión de la línea Puente Moreno la noche del pasado jueves 29 de febrero en el puerto de Veracruz

Veracruz, Veracruz.- Myriam Serrano, reportera del diario Imagen del Golfo y del Órale, falleció tras ser atropellada la noche del pasado jueves 29 de febrero por el conductor de un camión de la línea Puente Moreno en la avenida Díaz Mirón, en el puerto de Veracruz.

Tranquila y trabajadora” son las palabras con las que compañeros del gremio periodístico de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río describen a Myriam Serrano, reportera del diario Imagen de Veracruz y Órale Jarocho, que murió esta mañana.

De acuerdo con testigos, Myriam Serrano cruzaba la avenida Díaz Mirón la tarde del pasado jueves 29 de febrero, cuando el conductor de un camión de la ruta Puente Moreno la atropelló dejándola con fracturas y en un estado de salud grave.

La reportera llegó al hospital muy malherida, con una fractura en el cráneo, varias más en el cuerpo y mucha pérdida de sangre por una herida en la pierna. Aun así, luchó. Sobrevivió toda la noche hasta que su cuerpo no pudo más.

Myriam acababa de salir de un evento que le tocó cubrir la tarde del jueves: la toma de protesta del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en Veracruz. 

Al menos una cuadra más adelante, otra compañera reportera, que también fue al evento, escuchó el ruido provocado por el accidente. Vio que había una persona atropellada y corrió para cubrir la nota. Se percató que era Myiriam la que estaba ensangrentada y tendida en la calle; apenas la había visto en el evento.

Un taxista, el conductor de una camioneta y otros ciudadanos siguieron al camión, pues el conductor del autobús ni siquiera se detuvo después de pasarle las llantas por encima a la joven.

Lo obligaron a detenerse. Una y otra vez el conductor repitió que no se dio cuenta, que no la vio, que no sintió el golpe y que por eso no se detuvo. 

Los elementos de la policía no querían detenerlo, no hasta que alguien lo señalara directamente. Uno de los testigos que se encontraba en la zona, acudió e hizo el señalamiento.

“No es posible que no la haya visto, que no la haya sentido cuando le pasó las llantas encima”, dijo Eduardo. El autobús tenía incluso las llantas lisas, sin dibujo.

Myriam se convirtió en una víctima más de los conductores del transporte público, muchos de ellos señalados por los usuarios de este servicio por manejar a velocidad imprudente, por no tener precaución, por pasarse los altos y jugar carreras con sus otros compañeros.