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La floración, el arte del cultivo en las fincas cafetaleras en Coatepec
Coatepec, Ver.- El olor de la floración se expande en las fincas cafetaleras de la región de Coatepec. Los productores tienen la esperanza de una mejor cosecha este 2024, porque notaron que en la actual temporada las flores son más abundantes en comparación con años anteriores.
De acuerdo Cirilo Elotlán Díaz, integrante del Consejo Regional del Café en Coatepec, los productores de café están en la primera etapa de floración “y se augura una buena cosecha para 2024-2025, porque además llovió y eso favorece mucho a las floraciones de café”.
Las matas de café lucen con las ramas llenas de flores, pero no se trata sólo de una temporada, pues este abril y también en mayo habrá nuevas floraciones; en tanto, la cosecha iniciará en noviembre y concluirá en febrero de 2025.
La planta de café florece por primera vez después de tres o cuatro años de hacer la plantación. Luego crecen flores pequeñas, delicadas y blancas, donde se unen las hojas y las ramitas, que desprenden un aroma dulce. La planta de café utiliza las hojas y las flores para reproducirse y mantenerse.
Durante la entrevista en el Pueblo Mágico de Coatepec, Cirilo Elotlán Díaz, explica que las actuales condiciones climatológicas son propicias para la producción del café, por lo que se espera que la producción traiga beneficios económicos.
La polinización tarda de seis a ocho semanas y, posteriormente, las flores producen una fruta similar a la cereza, pues estas inicialmente son verdes, pero ya con el paso del tiempo, según la variedad, se vuelven rojas, amarillas, naranjas o incluso rosadas. Se vuelven más dulces a medida que maduran.
Durante el recorrido en las fincas cafetaleras, de las más importantes de la entidad, Ángel Máximo Arellano, uno de los productores, dice que el café tiene varias capas; la externa que es la piel de la fruta.
La carne se llama mesocarpio. La cubierta de la semilla se llama endocarpo. También está la piel plateada y las semillas de café. Estas también se conocen como endospermas con embriones.
En Veracruz hay 10 regiones cafetaleras, de las cuales el potencial más fuerte de producción es Huatusco, Córdoba, Zongolica y Coatepec, donde se augura una mejor cosecha en comparación con los últimos dos años.
COSECHA Y LA ROYA
En el territorio jarocho se cosecha el aromático en más de 90 mil hectáreas, que producen más de 764 mil quintales, casi un millón de kilos que cosechan casi 15 mil caficultores en la entidad.
Entre los retos que los cafeticultores enfrentan desde hace 11 años se encuentran superar la plaga de la roya y que esta no afecte a las siembras, ya que este hongo decolora las hojas hasta secarlas y por lo tanto peligran los frutos.
Se trata del principal problema fitosanitario de alto impacto para la caficultura. Las pérdidas en América Latina se calculan en 30 por ciento de las cosechas, según estudian los mismos productores.
Se tienen expectativas positivas para este 2024, ya que la producción del aromático en la región central de Veracruz se reporta con excelente florecimiento, lo que podría aumentar las cosechas.
“Pero además se garantiza la calidad y variedad del café, debido que en la entidad veracruzana hay distintas alturas en las que están las siembras cafetaleras, lo que permite mayor competencia entre el gusto de los compradores”, dice Ángel Máximo Arellano.
Hasta hace un tiempo, de acuerdo con el Padrón Nacional Cafetalero (PNC), se tenía el registro de 135 mil hectáreas, pero solo se conservan 90 mil hectáreas.
LOS CAMBIOS DE CULTIVO
En los últimos 10 años, aproximadamente 25 mil hectáreas de cafetales fueron devastados en el estado de Veracruz, de acuerdo con datos de los integrantes del Consejo Regional del Café.
La devastación se derivó por el crecimiento de las ciudades y la zona cañera, principales factores que provocaron que las plantas de café fueran retiradas para darles otro uso a esas tierras.
Recuerdan que desde 2013 la roya comenzó a dañar los cultivos, hizo que aumentaran las necesidades de derribar los plantíos ante la falta de recursos económicos y la indiferencia de las dependencias como las secretarías de Desarrollo Agropecuario por la imposibilidad de detener la plaga.
Las afectaciones inmediatamente fueron notorias porque en la entidad veracruzana, la entonces Sagarpa, reportó sólo la cosecha del 70 por ciento entre 2013 y 2016, una caída demasiado drástica.
“Para que no ocurrieran los daños tan severos eran necesarios los programas emergentes como el empleo temporal que con eso se ayuda a la contratación de más gente que ayude a trabajar ycuidar las cosechas”, relata.
CAFÉ ARÁBICA EN RIESGO
De acuerdo con el también secretario de la Coordinadora Nacional de Organizaciones Cafetaleras (CNOC), Cirilo Elotlán, se prevé que los cultivos de café arábica podrían desaparecer en los siguientes cinco años por la falta de apoyos gubernamentales, de lluvias y de mano de obra.
La arábica es una de las variedades de café considerada la mejor del mundo. Aunque existen más de 100 especies diferentes de cafetos, cada tipo de grano cuenta con unas características que lo hacen diferente a los demás, debido al entorno en el que se cultivan. En niveles de producción, solo dos copan casi la totalidad: el café arábica y el robusta.
El conflicto inició tras la desaparición del Instituto Mexicano del Café, pues cambiaron las leyes por las políticas neoliberales, orientadas hacia un mercado globalizado, donde unas cuantas compañías, como Nestlé y Cafés California, por mencionar algunas, controlan el mercado a nivel mundial.
Tan sólo la cosecha de café en la región de Coatepec, en el ciclo 2023-2024, fue catastrófica debido al adelanto causado por el cambio climático y a los bajos precios pagados a los productores. Los precios de bolsa y la intermediación de las comercializadoras también afectaron negativamente a los cafeticultores.
El precio ideal para los productores sería de 15 pesos por kilogramo de café cereza y cuatro mil pesos por quintal de pergamino, pero actualmente se está pagando entre 10 y 12 pesos por kilo.
La ganancia está en manos de las grandes comercializadoras que compraron café a bajo precio y lo venden a un precio más alto, mientras que los productores sufren pérdidas.
El grano de arábica tiene menos cuerpo que el grano de robusta: es más equilibrado, con buen aroma y tiene una acidez suave y agradable al gusto. Tiene entre un 0.8 por ciento y 1.4 por ciento de cafeína, mucho menos si se compara con el cuatro por ciento que tiene el grano robusta.