Orizaba, Veracruz.- Por dictaminación de un juez federal, el ayuntamiento de Orizaba obtuvo un amparo en relación al problema de los transportes urbanos conocidos como "Gallos". En el se ordena al gobierno del Estado de Veracruz la entrega inmediata de los tres autobuses “Gallo”, propiedad del municipio que fueron asegurados en un operativo de la Dirección General de Transporte Público por circular de forma “irregular”.

Así lo confirmó, la síndica y representante legal del ayuntamiento, Michelle Fragoso Martínez, quien informó que, a pesar de que pagaron la multa económica de cien mil pesos por cada autobús, no les fueron devueltas las unidades, por lo que procedieron a tramitar un amparo, cuya resolución fue favorable al municipio, encabezado por el alcalde Juan Manuel Diez Francos.

El aseguramiento y envío al corralón de los tres autobuses Gallo ocurrió desde el pasado jueves 9 de noviembre, cuando personal de la Dirección de Tránsito y Transporte realizó un operativo interceptando a los conductores del servicio de transporte turístico que implementó el municipio. 

A través de un comunicado oficial, la funcionaria afirmó que, el ayuntamiento pagó la multa de cien mil pesos por cada uno de los autobuses; sin embargo, no logró la recuperación de los vehículos. Debido a ello las autoridades municipales tramitaron el recurso de amparo que les fue concedido.

“Nos aceptaron el dinero, pero no nos devolvieron las unidades, por lo que decidimos tramitar un amparo ante un juez federal […] el juez emitió una suspensión que ordena a las autoridades correspondientes devolvernos las unidades”, enfatizó. 

La síndica orizabeña, advirtió que: “Es claro que advirtió que de no concederse la suspensión de referencia, se le causarían daños y perjuicios de difícil reparación, los que se traduciría en que se continúe privándo la posesión de los citados vehículos, máxime que la parte quejosa es un ayuntamiento, por lo que los recursos materiales deben ser utilizados óptimamente”.

Fragoso Martínez acusó que sin importar la necesidad de la gente que es usuaria de ese servicio de transporte, ni el fiscal ni el delegado de Tránsito estatal han querido agilizar la entrega de los camiones, pasando por alto el ordenamiento judicial.

“Sí nos duele que estos camiones no puedan funcionar, sobre todo los Búho, porque hay mucha gente que trabaja de noche y otros más que tienen que trasladarse muy temprano; ahora tendrán que tomar taxis y eso hace que se salgan completamente de sus presupuestos, aseveró.