Veracruz, Ver.- El descuido de un habitante de la colonia Reserva Tarimoya I en el puerto de Veracruz provocó un incendio que acabó con dos viviendas. El accidente sucedió la mañana de este miércoles 15 de noviembre.

Mauro Corrales dejó encendido un brasero con su desayuno; mientras tanto, aprovechó para salir a la calle y hacer un mandado, sin embargo, el fuego que dejó sin supervisión provocó el incidente que acabó con su vivienda y la de su primo José Luis Leal.

A cubetadas, vecinos de la zona intentaron sofocar las llamas, pero al verse rebasados por el fuego, llamaron a los elementos del Heroico Cuerpo de Bomberos Municipales.

Las mangueras de los bomberos lanzaron chorros de agua hasta que el siniestro quedó controlado. El fuego acabó con todas las pertenencias de Mauro y de José Luis.

De las viviendas hechas de lámina, madera y cartón solo quedaron escombros, ceniza y un fuerte olor humo. No hubo víctimas mortales ni personas lesionadas.

Mauro apenas trataba de asimilar lo que sucedía, así que comenzó a caminar entre los escombros para tratar de rescatar un poco de la chatarra que quedó entre las cenizas.

“Sí, pues tratando de recuperar algo, aunque sea los alambritos, pues ya ve cómo quedamos”, expresó.

Los hechos ocurrieron en el cruce de las calles Alondra y Cerrada del Paraíso. Los lotes I y II quedaron completamente calcinados.

Se cree que una brasa de la leña en la que se calentaba la comida de Mauro voló a causa del viento y en consecuencia se generó el incendio.

José Luis Leal descansaba cuando se percató del humo y de las llamas. Alcanzó a salir ileso, sin embargo, perdió todas sus pertenencias.

“Perdí todo, mis documentos, mis papeles, mi dinero, ahorita me quedé sin un peso. Mira cómo me quedé, con un short y unas chanclas nada más. Yo estaba descansando cuando todo sucedió”, dijo Mauro, quien trabaja como empleado de Limpia Pública del ayuntamiento de Veracruz.

El hombre reconoció que el accidente fue producto del descuido de su primo al salir a la calle y dejar la lumbre prendida.

“Hay que ser honestos, él dejó la lumbre, se le ocurrió ir a un mandado y mire lo que pasa, o sea, es peligroso. Desgraciadamente, a veces la gente por la falta de recursos, pues cocina con su leñita”, refirió.