Ciudad de México. Ante “el riesgo real de muerte” de Bernalda Rosas Sánchez, indígena náhuatl de Orizaba, Veracruz, en huelga de hambre, diputados federales de Morena piden que el Congreso de la Unión haga un llamado al alcalde de ese municipio, Juan Manuel Diez Francos, para que atienda las demandas de los artesanos de su comunidad.

En el documento entregado a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, los diputados federales Rocío Nahlé García, Blandina Ramos Ramírez y Cuitláhuac García Jiménez, recordaron que el señor José Francisco Nicolás Flores también se mantuvo en huelga de hambre durante un mes, en demanda de que se respete el derecho al trabajo de los artesanos de la localidad, pero las autoridades municipales hicieron caso omiso.

Destacan que tanto Bernalda como José Francisco, oriundos de la comunidad de Ixhutlancillo iniciaron su huelga de hambre el pasado 24 de mayo como una medida pacífica de protesta, ante la ilegal prohibición de que los indígenas siguieran comerciando sus artesanías en el centro de Orizaba, como lo han hecho desde hace cientos de años.

Dicha prohibición, aprobada por el Cabildo previa consulta ciudadana, tuvo como argumento mejorar la imagen del centro del municipio, pero en realidad “no es otra cosa que una forma encubierta de racismo por razones económicas”, dicen los legisladores.

Añaden que ante la negativa de abandonar su fuente de trabajo, en dos ocasiones dichos artesanos han sido agredidos por la policía municipal de Orizaba.

“En ambas ocasiones fueron brutalmente golpeados por ejercer su derecho al trabajo como vendedores de artesanías y plantas de ornato de una manera ambulante en el centro de Orizaba”, denunciaron los diputados federales.

Además, dicen, 15 de esos artesanos fueron encarcelados durante varios días en instalaciones de Seguridad Pública de Orizaba, en donde se les maltrató, amenazó e intimidó.

Los diputados de Morena aclaran que el ayuntamiento no tiene facultades constitucionales ni legales para organizar dicha consulta. Motivo por el que pasado 21 de mayo del año en curso, el Tribunal Electoral del Estado de Veracruz anuló la mencionada consulta ciudadana, determinando que el gobierno municipal no posee atribuciones legales para ello.

Pese a lo cual, el gobierno municipal de Orizaba no sólo mantiene la prohibición para los vendedores de artesanías, sino que además “el edil los ha discriminado, fomentando muestras de odio hacia ellos, publicando a través de las redes sociales y exhibiéndolos  como indios guarachudos patas rajadas”.

El documento resalta que de manera espontánea los ciudadanos de Orizaba han expresado su apoyo y tolerancia, a través de más de 25 mil firmas, para que los indígenas puedan vender en su calidad de ambulantes en el Centro de la Ciudad.

Sin embargo, el alcalde mantiene su negativa al diálogo con los afectados, aún y cuando el artículo primero de la Constitución Política y diversos tratados internacionales establecen el derecho a ejercer un trabajo lícito. Prohibiendo además todo tipo de discriminación, incluso por motivos étnicos.

Por ello, los diputados de Morena solicitaron a la Comisión Permanente del Congreso de la Unión que exhorte al alcalde de Orizaba, Veracruz, Juan Manuel Diez Francos, “a que atienda de manera inmediata las demandas de indígenas náhuatls de la comunidad de Ixhuatlancillo que se encuentran en huelga de hambre, permitiendo el uso del espacio público para la venta de artesanía.

Además, que cumpla sin dilaciones la sentencia del Tribunal Electoral del Estado de Veracruz recaída en el Juicio para la Protección de los Derechos Políticos del Ciudadano JDC74/2016, que anuló la consulta sobre el uso del espacio público y determinó que el gobierno municipal no posee atribuciones legales para realizar el procedimiento y a la vez vigilarlo.