Comienza la cuenta regresiva para la toma de posesión del presidente electo número 46 de los Estados Unidos, Joe Biden, y su suplente, Kamala Harris, la primera mujer afroamericana en ostentar dicho cargo, quienes resultaron victoriosos en las elecciones del pasado mes de noviembre en la unión americana, en medio de un controversial proceso electoral ante el actual mandatario Donald J. Trump.
Este último, con todo el trabajo realizado junto a su lema: “Make America Great Again”, no logró concentrar el voto mayoritario de los estadounidenses, quienes en un hecho histórico le dieron a Biden el título del “presidente más votado” en la historia de Estados Unidos con un total de 81.3 millones de votos aproximadamente (51.4%), superando el record del propio expresidente Barack Obama y dejando a Donald Trump en el segundo lugar de la contienda con una diferencia de más de 7 millones de votos, según el medio The Associated Press.
De la misma forma, en lo que respecta a los votos electorales, los cuales eligen de manera directa al próximo presidente estadounidense, Joe Biden obtuvo también la mayoría al ganar 306 de 270 votos necesarios para la victoria, contra 232 logrados por Trump, es decir, una diferencia de 74 votos. De esta manera, se daba por terminada la administración del polémico presidente y comenzaba una nueva de esperanza en el pueblo estadounidense, ante tantas acciones realizadas en este periodo que empañan el papel que durante muchos años ha representado la unión americana en el ámbito internacional.
De esta manera, en los próximos días, Joe Biden tomará posesión de las riendas del país para comenzar con diferentes acciones que echen atrás las realizadas por su antecesor, las cuales sin duda tienen a la expectativa también a la clase política mexicana y al propio presidente, Andrés Manuel López Obrador, debido al acercamiento que este último mantuvo con Trump desde la ratificación del T-MEC (Tratado México, Estados Unidos y Canadá) y en algunos otros actos de colaboración entre ambas naciones.
No debe descartarse también, el último suceso que sin duda marca una etapa histórica entre el gobierno mexicano y el estadounidense, y el cual le tocará abordar al nuevo mandatario a partir del próximo 20 de enero, la liberación del General Salvador Cienfuegos, exsecretario de la Defensa Nacional mexicana, por parte de la Fiscalía General de la Republica (FGR), luego de que fuera extraditado por los Estados Unidos a México a finales de 2020, tras ser capturado por la DEA (Drug Enforcement Administration, por sus siglas en inglés) en octubre del mismo año.
En este caso, el hecho se ha vuelto más controversial debido a la postura del gobierno mexicano de respaldar la decisión de la FGR, con el argumento de que los cargos fueron fabricados por la propia DEA para encarcelar al ex secretario mexicano. Así mismo, el propio presidente, AMLO, se atrevió a afirmar que Cienfuegos nunca tuvo encuentro alguno con los integrantes de la organización delictiva investigada por las autoridades norteamericanas; y tampoco sostuvo comunicación alguna con ellos, ni realizó actos tendientes a proteger o ayudar a dichos individuos.
En este sentido, todos estos acontecimientos, aunados a la difícil situación que se vive debido a la pandemia por Covid-19 en Estados Unidos y México, más las caravanas migrantes provenientes de Centroamérica que comienzan a surgir nuevamente este mes de enero con la finalidad de llegar a la unión americana, y que vuelven a poner en jaque al gobierno mexicano, debido al pacto que también selló con Donald Trump y ahora le tocará refrendar con Joe Biden, no son más que lo que le corresponderá a este último hacer frente después de su toma de posesión.
En un hecho sin precedentes, Biden, logra convertirse en presidente de los Estados Unidos derrotando para su segundo periodo a un mandatario en funciones y arrasando tanto en las urnas como en los votos electorales, algo nunca antes visto en la época reciente, desatando la ira de Trump al grado de convocar a sus seguidores a la insurrección en el Capitolio, hecho que deja como resultado 5 personas muertas, varios detenidos, y por el cual el aún presidente enfrenta un proceso de juicio político del que no se sabe si esta vez saldrá librado.
Es cuanto.