Córdoba, Ver. — Después de una década de evadir la justicia, Michelangelo Antonioni Juárez Reyes ha sido detenido. Este hombre es señalado como el presunto responsable del brutal feminicidio de su madre, María del Carmen Juárez Sandoval, un crimen que conmocionó a la región de Río Blanco, Veracruz, justo en vísperas del Día de las Madres de 2014.

El horror en el Día de las Madres: cronología del crimen

El 7 de mayo de 2014, la tragedia comenzó a develarse cuando Lenochka del Carmen Reyes Juárez, hija de la víctima, acudió ante el Ministerio Público de Río Blanco. Habían pasado varios días sin lograr comunicarse con su madre, lo que motivó la denuncia por desaparición.

La inquietud familiar se transformó rápidamente en horror. Al acudir al domicilio de la mujer, ubicado en la colonia Benito Juárez, las autoridades y familiares notaron un fétido olor que emanaba del interior de la vivienda.

Dentro de la casa, se detectaron signos inequívocos de violencia, incluyendo rastros de cabello y manchas de sangre, que de inmediato hicieron presumir un hecho delictivo grave. La clave del macabro hallazgo se encontró en el patio: tierra removida. Al excavar, se localizó un bulto envuelto en una sábana, confirmándose poco después que se trataba del cuerpo de María del Carmen Juárez Sandoval.

Indagatorias y la brutalidad del asesinato

Desde las primeras diligencias, las autoridades centraron las sospechas en Michelangelo Antonioni Juárez Reyes y su entonces pareja, Jonathan Ulises Medina Rojas, como los probables autores del crimen.

Testimonios de vecinos revelaron que la vivienda era escenario frecuente de discusiones y episodios de violencia dirigidos hacia la mujer. Días antes del hallazgo del cuerpo, ambos sujetos fueron vistos sacando muebles y abandonando el lugar apresuradamente.

La necropsia detalló la saña con la que fue perpetrado el matricidio: la víctima fue golpeada brutalmente, incluyendo impactos con una pala en la cabeza y diversas partes del cuerpo. Posteriormente, los agresores habrían intentado incinerar el cuerpo para eliminar evidencia y, finalmente, lo enterraron en el patio trasero de la casa, intentando ocultar el crimen de manera definitiva.

Justicia tras la impunidad: reclamo social en Río Blanco

El caso de María del Carmen Juárez Sandoval provocó una profunda indignación social debido a la crueldad ejercida en el seno familiar y el prolongado periodo de impunidad. Durante la década que duró la fuga, colectivos de mujeres y familiares mantuvieron la exigencia de que el expediente no fuera archivado, convirtiendo el caso en un doloroso símbolo de la violencia extrema en la región.

Con la captura de Michelangelo Antonioni Juárez Reyes, la familia y la sociedad confían en que el proceso judicial avance con celeridad. Se espera que se esclarezcan totalmente los hechos y se dicte una sentencia ejemplar que finalmente otorgue justicia a la víctima, cerrando uno de los capítulos más oscuros en la historia criminal de Río Blanco.

(AC)