Xalapa, Ver.- Los municipios de Acultzingo, Ciudad Isla, Emiliano Zapata, Playa Vicente y Uxpanapa fueron identificados como “desiertos informativos” por el estudio Desiertos de Noticias Locales, elaborado por la Fundación García Márquez (Fundación Gabo).

En estas localidades, la población carece de información suficiente y enfrenta barreras para acceder a medios de comunicación confiables.

El documento revela que las condiciones que provocan esta aridez informativa van desde la falta de infraestructura básica y escasa penetración de internet, hasta la presencia de grupos criminales que limitan la libertad de prensa. A ello se suma la ausencia de medios en lenguas originarias, lo que deja a comunidades indígenas, sin acceso a noticias en sus propios idiomas.

En consecuencia, los habitantes de estos municipios dependen de radios de onda corta, cadenas de WhatsApp o comunicados oficiales como sus principales fuentes de información, lo que genera un panorama desigual respecto al derecho ciudadano a estar informado.

El estudio, presentado el 14 de agosto de 2025, forma parte de una investigación regional que analizó la situación informativa en Argentina, Chile, Colombia, México y Perú.

A través de un mapa interactivo, los territorios fueron clasificados en cuatro categorías: desiertos, semidesiertos, semibosques y bosques informativos.

En el caso de México, de los 351 municipios evaluados, 149 fueron catalogados como desiertos informativos (42.5 %), 93 como semidesiertos (26.5 %), 61 como semibosques (17.4 %) y 48 como bosques informativos (13.6 %).

Además, de los cinco municipios en situación crítica, la investigación detectó otras zonas con dificultades. Las Choapas y San Andrés Tuxtla fueron clasificados como semidesiertos informativos, debido al cierre de medios de comunicación o la reducción de sus plantillas por falta de financiamiento y riesgos de inseguridad.

En contraste, Poza Rica fue considerada un semibosque informativo: una ciudad donde, pese a la violencia y a la crisis económica, existen esfuerzos sostenidos por mantener medios locales que proveen información a la ciudadanía.

El informe también advierte que en ocho municipios veracruzanos existe un mayor flujo de información: Acayucan, Coatzacoalcos, Córdoba, Martínez de la Torre, Minatitlán, Orizaba, Veracruz puerto y Xalapa. 

Sin embargo, aclara que la operación de gran parte de los medios en estas ciudades, depende de recursos públicos o institucionales, lo que compromete su independencia editorial.

La investigación de la Fundación Gabo advierte que los desiertos informativos en México responden a una combinación de factores: precariedad laboral en el periodismo, falta de financiamiento privado, dependencia de la publicidad oficial, así como violencia y amenazas contra comunicadores.

A nivel nacional, el 36.5  por ciento de los medios declaró que más de la mitad de sus ingresos provienen de fondos públicos, y otro 26 por ciento señaló que representan menos de la mitad de sus recursos. Además, más del 45  por ciento reconoció depender de contenidos patrocinados o publirreportajes para sostenerse.

En el plano laboral, el sector enfrenta condiciones precarias: apenas el 33  por ciento de los periodistas cuenta con contratos formales, mientras que la mayoría trabaja como freelance, bajo comisión o incluso de manera informal.

A esto, se suma que cuatro de cada diez medios afirmaron haber recibido amenazas o presiones durante el último año, lo que alimenta la autocensura.