Xalapa, Ver. – Los expolicías de la extinta Policía Intermunicipal de Poza Rica–Tihuatlán–Coatzintla comenzaron a recibir los pagos correspondientes a sus liquidaciones, luego de haber sido víctimas de un fraude durante la administración de Javier Duarte de Ochoa. Así lo informó el secretario de Gobierno, Ricardo Ahued Bardahuil.

En entrevista, Ahued detalló que el pasado 28 de abril se entregaron los primeros 50 cheques a ex elementos de esta corporación, quienes fueron despedidos en 2015 tras la disolución de dicha policía en la región norte del estado.

“Ayer comenzamos a resolver un problema de muchos años, un fraude cometido contra policías a quienes se les robó el pago de su indemnización. Entregamos los primeros casi 50 cheques. Aunque las cantidades son relativamente menores, el tema ya se está atendiendo”, explicó.

El funcionario agregó que se requerirán aproximadamente 4 millones de pesos para cubrir el total de las liquidaciones, y que los pagos se realizarán de manera escalonada, conforme los ex policías presenten la documentación que acredite su situación.

Ahued también reconoció que todas las personas afectadas fueron víctimas de fraude, y lamentó que las administraciones posteriores, tanto la de Miguel Ángel Yunes como la de Cuitláhuac García Jiménez, no le hayan dado seguimiento al caso.

Cabe recordar que durante el último año, exelementos de la Policía Intermunicipal se manifestaron en repetidas ocasiones frente al Palacio de Gobierno, exigiendo la intervención de las autoridades estatales. No fue sino hasta este año que sus demandas fueron atendidas.

En 2015, el entonces gobernador Javier Duarte les informó que la corporación sería reestructurada y que serían debidamente liquidados. Sin embargo, esto no ocurrió, y alrededor de 400 elementos quedaron sin empleo ni compensación.

De ese total, cerca de 100 ex policías continuaron con procesos legales al descubrir que sus cheques de liquidación habían sido cobrados por otras personas sin su consentimiento.

Al respecto, los afectados denunciaron que al menos 30 compañeros fallecieron esperando el pago, ya que la mayoría eran adultos mayores. El secretario no confirmó si las familias de los policías fallecidos serán indemnizadas.