Xalapa, Ver.- “No hablé con el señor Yunes, ni con su hijo”, respondió el presidente Andrés Manuel López Obrador, rechazando que haya existido cualquier tipo de negociación con la familia Yunes para asegurar su voto y lograr la aprobación de la Reforma al Poder Judicial.

En su conferencia de prensa, el presidente fue cuestionado sobre el tema, donde sostuvo que él no negoció. Sin embargo, no descartó que el secretario de Gobernación y coordinador del grupo parlamentario de MORENA en el Senado, Adán Augusto López, haya tenido algún diálogo o negociación.

“Le podría decir que no hablé con el señor Yunes, ni con su hijo, sí, posiblemente Adán Augusto habló con Yunes, claro, porque a él le corresponde. Él es legislador, ese es su trabajo. Yo envié una iniciativa de Reforma a la Constitución y son los legisladores quienes hacen el trabajo”, explicó.

En ese sentido, indicó que no tiene confirmación de que haya sido así. Sin embargo, aclaró que no cree que su ex secretario de Gobernación haya "transado".

“No me informó (Adán Augusto López Hernández), pero no creo yo que haya transado, para decirlo con claridad. Eso no lo hace ningún integrante de Morena, eso era lo que se hacía en tiempos de Salinas, o sea, eso es lo que se siguió haciendo sin Salinas, que continuó el salinismo como política. No solo eso, peores cosas, pero no un dirigente de Morena transa como se supone”.

En ese sentido, el presidente pidió que no se realicen interpretaciones simplistas sobre el voto de Miguel Ángel Yunes Márquez, señalando que cada legislador votó de manera libre y afirmó estar satisfecho con la aprobación de la reforma judicial, sin importar de dónde provengan los votos.

Ante los cuestionamientos sobre posibles acuerdos políticos, el presidente reiteró que no hubo ningún tipo de negociación con los Yunes de su parte.

Durante su discurso, el presidente aclaró que mantiene diferencias con la familia Yunes, pero insistió en que estas divergencias no influyeron en la votación.

“Tengo diferencias con él, son públicas, notorias, como tengo diferencias con muchos otros, pero siempre en la política hay que optar entre inconvenientes y buscar el equilibrio entre la eficacia y los principios”, declaró.

López Obrador también destacó la importancia de la reforma judicial para el país, en especial la elección popular de jueces, que sustituirá el actual sistema de nombramientos desde las cúpulas del poder.

Señaló que, más allá de cómo se logró la mayoría en el Senado, lo relevante es el impacto que esta reforma tendrá en el futuro de México.

“Es importante cómo se logró esa mayoría, pero también hay que ver el beneficio que va a significar para el futuro de nuestro país que puedan los jueces impartir justicia por haber sido electos por el pueblo, no por las cúpulas del poder”, dijo.