- Seguridad
Privan de la libertad a dos hombres en la zona centro de Veracruz
Nogales, Ver.- Dos hombres fueron víctimas de la privación ilegal de su libertad en distintos hechos, pero lograron escapar de sus captores, entre la tarde del lunes 2 y este martes 3 de septiembre, aunque, uno de ellos resultó herido con arma de fuego tras el ataque de los delincuentes, quienes lo dieron por muerto y lo abandonaron.
Según la información recabada, se trató de un microempresario del giro de alimentos preparados vecino Nogales quien fue “levantado” la noche del pasado sábado 31 de agosto, pero a menos de 48 horas de que lo mantenían cautivo, logró darse a la fuga, sin embargo, no pudo evitar resultar herido.
Los informes policiacos revelan que los hechos ocurrieron alrededor de las 20:30 horas del sábado, cuando la víctima identificada como: Eduardo "N", de 25 años circulaba en su automóvil sobre el tramo de la carretera federal Orizaba-Tehuacán, a la altura del municipio de Nogales, Veracruz.
De acuerdo a las declaraciones que rindió a las autoridades, el hombre cuenta con dos pizzerías en esa zona, por lo que, de manera frecuente viaja entre ambas ciudades, pero el pasado fin de semana, ya no pudo llegar a su domicilio debido a que fue interceptado por varios sujetos a la altura del lugar conocido como: El Rincón de las Doncellas.
A punta de amenazas y portando pistolas, los agresores lo bajaron por la fuerza de su vehículo y lo subieron a otra unidad, en la cual se lo llevaron hasta un camino de terracería, ubicado en la comunidad de Rancho Nuevo. Allí, los sujetos lo golpearon y posteriormente le dieron dos balazos, uno en la pierna y otro en la cabeza.
Debido a las condiciones en las que se encontraba, Eduardo fue dado por muerto por sus plagiarios, quienes optaron por dejarlo tirado en un camino de terracería. Sin embargo, una vez que se cercioró que los delincuentes se habían alejado, la víctima logró ponerse de pie y con esfuerzos, caminó hasta el panteón rural, ubicado en la localidad Llano Grande.
En ese lugar, la víctima se escondió en el cementerio donde pasó varias horas aun con las heridas de bala, ya que fue casi un día después cuando por fin, fue auxiliado por dos lugareños, quienes al notar que se encontraba manchado de sangre, llamaron al número de emergencias 911 para pedir el apoyo de las autoridades.
Tras la alerta, los policías municipales de Nogales solicitaron ayuda a paramédicos locales, quienes lo trasladaron de emergencia a un hospital, donde su estado de salud es reportado como grave, debido a la sangre que perdió. La Fiscalía Regional tomó conocimiento de los hechos y abrió una carpeta de investigación por los delitos de secuestro e intento de homicidio de Eduardo, contra quien o quienes resulten responsables.
Una vez que un perito criminalista y el médico legista realizaron sus diligencias, agentes de la Policía Ministerial iniciaron las indagatorias, pero hasta la tarde de este martes 3 de septiembre, no contaban con alguna línea de investigación ni con la identidad de los responsables.
Panadero también la libra
En otro extremo de la región montañosa, un panadero originario de Amatlán de los Reyes que había sido secuestrado, escapó de la casa de seguridad donde lo mantenían cautivo en la comunidad de San Isidro Palotal, perteneciente al municipio de Córdoba, Veracruz.
En este caso, se conoció que la víctima fue auxiliada por elementos policiacos, quienes lo resguardaron y llevaron a la Unidad Integral de Procuración de Justicia donde tomaron sus generales y primer testimonio, al tiempo de turnar el caso a la Fiscalía especializada.
En este caso, se trató de José de Jesús "N", de 26 años, quien el pasado lunes dos de septiembre, por la tarde, perdió contacto con sus familiares, luego de que salió a vender pan como de costumbre a bordo de una camioneta.
Sin embargo, cuando recorría las calles de Amatlán, ofreciendo su producto, fue interceptado por varios sujetos quienes se lo llevaron por la fuerza a la vivienda donde se cree que, ha sido mudo testigo de delitos similares.
Luego de que sus familiares se percataron de su desaparición, ya que intentaron localizarlo mediante llamadas a su teléfono celular, pero el dispositivo estaba apagado, decidieron reportar su ausencia a las autoridades e interpusieron la denuncia en la Fiscalía Regional.
En medio de la angustia de sus seres queridos y del trauma que vivió en las últimas horas, el panadero logró salir de la vivienda, a pesar de que sus captores lo mantenían maniatado, pero como pudo, llegó a una casa donde pidió ayuda a sus moradores quienes al enterarse de la gravedad del asunto, dieron aviso a las autoridades.
Minutos más tarde, diversas patrullas de la Policía Estatal llegaron al punto. Allí, los uniformados resguardaron a José de Jesús y lo llevaron a la Fiscalía para que rindiera su declaración tras haber sido víctima de secuestro. Los detalles, respecto a las posibles causas, aún se desconocen.