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Mueren cientos de peces en la laguna del Ostión en Coatza
Coatzacoalcos, Ver.- Miles de peces de la especie sardina fueron encontrados muertos en la Laguna del Ostión y en la zona conocida como La Isla, ubicada en la congregación de Las Barrillas, perteneciente al municipio de Coatzacoalcos. El hallazgo se dio la mañana de este lunes 1 de julio.
Al percatarse del hallazgo, prestadores de servicios turísticos comenzaron a recolectar las sardinas muertas que estaban frente a los restaurantes debido al mal olor que empezó a emanar. Las especies fueron enterradas en la playa para evitar un foco de infección, sin embargo, en el afluente quedaron esparcidos más ejemplares.
“Las estamos recolectando para que no se apeste aquí, como a las 8:00 de la mañana todo esto aquí había bastante y ya la estamos enterrando y la verdad no sabemos qué pasa, no sabemos de qué murieron, solo estamos recogiendo para que no apeste”, dijo uno de los restauranteros.
Hasta el momento, se desconoce la causa de la muerte de los peces. Las autoridades ambientales aún no se pronuncian al respecto y siguen sin acudir al lugar para tomar conocimiento del hecho.
De acuerdo con el oceanólogo Homero Bennet, podrían ser diferentes factores los que provocaron la mortandad, por lo que expuso la necesidad de tomar una muestra del agua y de uno de los peces para determinarlo con exactitud.
“Entre las posibles causas de la mortandad de estos peces, una puede ser debido a hidrocarburos; dos, puede ser debido a pesticidas y herbicidas de uso agrícola pecuario, recuerden que ha llovido por días, el agua que cayó en los campos arrastra todo hacía los ríos, lagunas o bocanas; tres, en otras publicaciones dicen que fue por al agua dulce, no siempre es cierto porque muchas especies de peces desovan entre las raíces de los manglares y ya juveniles salen hacia el mar.
"Lo correcto es la toma de una muestra del agua y uno de los peces muertos y hacer un análisis químico para buscar posibles contaminantes o patógenos”, detalló el experto.
Esta mortandad de sardinas generó preocupación entre los locales, principalmente entre los pescadores que viven de lo que capturan en esta zona y que temen haya una grave contaminación.