Veracruz, Ver.— El gobernador Cuitláhuac García Jiménez confirmó el aseguramiento de dos centenares de armas de uso exclusivo del Ejército en un edificio del fraccionamiento Costa de Oro en el municipio de Boca del Río. 

En redes sociales, García Jiménez dio algunos detalles sobre las acciones que se llevaron a cabo en el marco del operativo. Al concluir la sesión de la Coordinación Estatal para la Construcción de la Paz (COESCONPAZ) el gobernador confirmó la noticia sobre el aseguramiento de armamento. 

En el operativo de la noche del pasado sábado 22 de junio participaron fuerzas armadas de los tres órdenes de gobierno. Lograron la ubicación y el aseguramiento de un inmueble donde se presume hay más de dos centenares de armas largas, según información preliminar.

Más tarde, en su conferencia de prensa desde Palacio de Gobierno, destacó que se trató de un duro golpe a la delincuencia.

"Hablamos de dos centenares de armas largas, probablemente la confiscación más importante de armamento de la delincuencia contra la delincuencia organizada de Veracruz-Boca del Río".

También compartió una fotografía de baja resolución y editada en la que se alcanzan a apreciar las armas aseguradas que por su forma podrían tratarse de las AK-47 o más conocidas como "cuerno de chivo".

"Pero la información que nos enteramos es que son dos centenares de armas largas, por lo que corresponde hacer un reconocimiento al trabajo de inteligencia de las fuerzas coordinadas de los tres órdenes de gobierno en esa región porque de eso luego no se habla, de estos  logros".

El mandatario estatal precisó que la Fiscalía General de la República (FGR) está interviniendo, además de que la Secretaría de Marina (SEMAR), Fuerzas Federales y Estatales resguardan el perímetro.

Aunque no dio detalles sobre la ubicación del inmueble asegurado, se sabe que se trata de un edificio localizado sobre la calle Ballena entre avenida Costa de Oro y bulevar Manuel Ávila Camacho. 

Hasta la mañana de este martes 25 de junio continuaba el operativo por parte de las autoridades estatales y federales dentro del edificio donde fueron halladas las armas.

La Marina Armada de México resguardó la zona con unidades de combate conocidas como “tanquetas”, además de una fuerte presencia de elementos de la dependencia.