La Fiscalía General del Estado de Veracruz (FGE) imputó a cinco personas involucradas por el delito de secuestro en agravio de ocho migrantes de diversos paíases latinoaméricanos. El juez dictó  prisión preventiva oficiosa de un año dentro del proceso penal 709/2024.

A través de un comunicado la fiscalía informó que a través de la Unidad Especializada en Combate al Secuestro imputó a Juan Carlos “N” alias “El Goody”, Luciano “N” alias “El Chano”, Adolfo Ángel “N” alias “El Lobo” y/o “La Pulga”, Ángel Andrés “N” alias “El Gordo” y Carlos Eduardo “N”  como probables responsables del delito de secuestro en agravio de siete personas y una menor de edad.

Los migrantes, de acuerdo con la fiscalía veracruzana, son de origen Venezolano, Hondureño y Colombiano. La autoridad especificó que en los hechos ocurridos el pasado viernes en Tierra Blanca se detuvo primero a Adolfo Ángel “N” alias “El Lobo”, y, a “La Pulga” como probable responsables de secuestro.

La víctima, según información proporcionada por la autoridad investigadora, tenía más de un mes de haber sido privada de su libertad —el secuestro ocurrió el 4 de mayo del año en curso—.  Fue a través de un operativo controlado donde fue detenido Adolfo Ángel “N” y la víctima fue liberada.

 Días después en otro operativo coordinado con la Secretaría de la Defensa Nacional, la Guardia Nacional, la Secretaría de Marina y las fuerzas estatales, fueron detenidos Juan Carlos “N” alias “El Goody”, Luciano “N” alias “El Chano”, Ángel Andrés “N” alias “El Gordo” y Carlos Eduardo “N”.

Entre los migrantes secuestrados había un menor de edad. Las personas agraviadas eran de diferentes nacionalidades: Venezolano, Hondureño y Colombiano.

¿Cómo ocurrieron los hechos?

Los migrantes secuestrados fueron trasladados a la colonia Lomas de Jazmín del municipio de Tierra Blanca en donde se ubicó la supuesta casa de seguridad. 

En ese sitio llegaron las autoridades el pasado viernes 14 de junio, y de acuerdo con la fiscalía, estos sujetos, hoy imputados, fueron sorprendidos en flagrancia del probable delito.

Inmediatamente después del descubrimiento por parte de las autoridades encargadas del operativo, los secuetradores dispararon en contra de los elementos policíacos que repelieron la agresión. Minutos después los policías lograron detenerlos. 

En el lugar aseguraron armas largas, cartuchos útiles, equipo táctico, equipos telefónicos, vehículos y una motocicleta.