Arturo Alvarado Mendoza, investigador de El Colegio de México, dijo que exámenes de confiabilidad que se aplican a cuerpos de seguridad "son controles políticos, pero no contribuyen a mejorar la calidad de las corporaciones policiacas".

"Es un sistema de control político y laboral que no tiene ningún sentido. Hay que cambiar ese sistema de control".

Entrevistado luego de ofrecer su conferencia "Las policías y sus transformaciones en América Latina”, en el  coloquio internacional “Paradojas de la Seguridad Ciudadana en América Latina, organizado por la Universidad Veracruzana, dijo que los cuerpos de seguridad atraviesan por un momento de crisis ya que tienen el rechazo de la sociedad, y a pesar de que se han hecho intentos por dar una imagen cercana a la población no han logrado ganarse la confianza de la gente.

En este sentido, consideró que incluso la estrategia de crear un Mando Único tampoco representa una solución a los problemas de seguridad del país. Dijo que este esquema es más bien, “otra parafernalia loca que se le ocurrió hace diez años, a algunos".

“Cuando comenzaron a desarrollar este modelo policial, decían que el país necesitaba un modelo policial único, lo cual es falso; lo que necesitamos es policía de barrio, de convivencia, preventiva municipal, y otra policía que sea capaz de combatir los delitos".

El investigador consideró que el gran problema de México en la actualidad es que "no existe un modelo policial en el país", cada gobernador, cada secretario de seguridad pública, cada presidente municipal hace lo que le da la gana con las organizaciones policiales, este es un problema de política pública muy grave, al que tenemos que darle una solución".