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No solo es Flor: Lizbeth fue asesinada en Jalisco por el mismo feminicida

  • Miguel Ángel León Carmona
Lizbeth Romero, de 16 años, fue asesinada en 2012 en Jalisco; su presunto feminicida es el mismo detenido por el crimen de Flor, de Teocelo

Xalapa, Ver. - Isabel desayunaba café con galletas en su casa, en el Salto Jalisco, cuando una noticia la estremeció desde su silla. Se enteró que Jaime García, a quien ha buscado desde hace 9 años por el feminicidio de su hija, Lizbeth Romero, fue detenido en Veracruz por otro crimen similar, el de Flor, una menor de 14 años originaria de Teocelo.

Isabel Carmona suspendió su desayuno este domingo, sacó dinero de sus ahorros y compró el vuelo más próximo de Jalisco a Veracruz para exigir que el presunto feminicida rinda cuentas por la muerte de su hija, a quien habría asesinado el 24 de diciembre de 2012.

Flor y Lizbeth nunca se conocieron. Una tenía 14 años y la otra 16. Ambas fueron asfixiadas en sus viviendas; Flor con una sábana y Lizbeth con las manos. Las dos esperaban un bebé de su presunto feminicida; con 8 y 7 meses de embarazo respectivamente. 

El probable responsable de estos dos crímenes es la misma persona: Jaime García, quien, tras huir de Jalisco en 2012 por el feminicidio de Lizbeth, regresó a su natal Veracruz con otro nombre: José Gutiérrez. La impunidad lo acompañó por casi una década.  

Isabel Carmona leyó en internet que Jaime García o José Gutiérrez fue detenido a finales de junio de 2022 por el feminicidio de Flor A. G. Era la misma persona con la que su hija “se juntó” en 2012. “Tiene un tatuaje de un demonio en su brazo y un absceso en la nuca. Voy a Veracruz para que se haga justicia”, dice la mujer desde el teléfono.

El pasado 28 de junio, Jaime “N” fue vinculado a proceso por los delitos de feminicidio y pederastia agravada en contra de Flor A.G. Un juez de Veracruz fijó como medida cautelar prisión preventiva oficiosa de un año y dos meses de investigación complementaria para que la Fiscalía General de Veracruz pueda acreditar los delitos y sea sentenciado. 

Flor A.G. era oriunda de la comunidad Cañada de Apilot, perteneciente a Teocelo. De acuerdo con Anayeli Sánchez Flores, integrante de un colectivo feminista en Xalapa, bajo amenazas, Jaime la obligó a vivir con ella en la colonia Las Higueras, a unos 45 kilómetros de Xalapa. 

Según la activista, la menor de edad tenía prohibido visitar a su familia, quien también recibía amenazas, y solo se comunicaba por mensajes desde el teléfono. 

La última vez que Flor se escribió con su madre fue la noche del 31 de enero de 2022. Dos días después fue hallada muerta en su casa, su cuello tenía alrededor una sábana. José Gutiérrez, de unos 36 años, logró huir de la justicia casi cinco meses. 

Lizbeth quería separarse de Jaime porque la golpeaba

Isabel relata que su hija, Lizbeth Alejandra Romero Carmona, conoció a Jaime García en 2011 en El Salto Jalisco. El hombre llegó de Veracruz a esa entidad con más familiares y consiguió trabajo en una empresa de frituras donde doraba papas. 

Lizbeth era dueña de un negocio de frituras y conoció a Jaime en la colonia La Pedrera. Al paso de unos meses se hicieron novios y comenzaron a vivir juntos. En 2012, mediados, Lizbeth le anunció a Isabel que estaba embarazada. “Ella estaba entusiasmada con la noticia”, recuerda la entrevistada. 

Sin embargo, Isabel comenzó a notar triste a la menor de 16 años. “Le pregunté qué tenía y me dijo que Jaime era celoso y que, de alguna manera, le molestaba que ella prosperara en su negocio. Se separaron 15 días, pero regresaron”, agrega. 

La noche del 24 de diciembre de 2012, Lizbeth fue asesinada por estrangulamiento y de varios golpes en el cráneo, después de regresar de vender frituras en un tianguis navideño. Su acta de defunción concluye: Asfixia mecánica en su modalidad estrangulamiento (manos) y contusión difusa de cráneo. Su hijo también falleció. 

Isabel denunció el feminicidio ante la Procuraduría General de Justicia del Estado de Jalisco, averiguación previa 7576/2012, donde señaló como principal sospechoso a Jaime García, quien después del crimen huyó de Jalisco. “Las autoridades nunca lo buscaron y se olvidaron de mi caso”, recrimina la madre. 

Desde entonces casi han pasado diez años. Isabel viajará este lunes 11 de julio a Veracruz con la intención de encontrar a los padres de Flor A.G. de Teocelo, y aportar todos los datos necesarios. “Tocaré todas las puertas que sean necesarias para que haya justicia”, dice sofocada mientras ordena documentos.

 

ys