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Sun Tzu fue un filósofo y militar chino que vivió en el siglo V antes de Cristo.

El Arte de la Guerra -su obra más conocida- representa un texto clásico en el mundo entero, con influencia en pensamientos y actos de Maquiavelo a Napoleón Bonaparte, por citar dos ejemplos.

La filosofía posterior al renacimiento del Siglo XVI, en particular la definición del filósofo y sociólogo Max Weber (1864-1920) sobre la violencia como elemento intrínseco al Estado, muestra una presencia evidente del pensamiento de Sun Tzu.

El México de la 4ta Transformación, a sólo cien días de haber entrado oficialmente en funciones, no puede ser entendido sin leer y releer El Arte de la Guerra.

Ocurre lo mismo en las 32 entidades del país y específicamente en aquellas que son escenarios de la guerra –mal llamada combate al crimen organizado- que recrudece sexenio tras sexenio desde Calderón hasta Peña Nieto y AMLO, así como Miguel Alemán, Fidel Herrera, Javier Duarte, Miguel Angel Yunes y Cuitláhuac García en el caso veracruzano.

Con un claro antecedente histórico en el sexenio de Agustín Acosta Lagunes por la lucha política de Cirilo Vázquez en el sur y los casos de violencia y represión oficial que se desataron en aquel contexto; los asesinatos ordenados desde el poder y ejecutados por Toribio Gargallo en el centro montañoso de sierra de Tezonapa y las crueles acciones de “La sonora matancera” encabezada por Felipe Lagunes desde Paso de Ovejas hasta Nautla, pasando por Cardel y municipios cercanos.

Todo ello en la década de los ochenta.

    ¿Cómo explicar la muerte de tres policías de la Fuerza Civil entre la noche del jueves y el sábado pasados en Tierra Blanca y Texistepec, Veracruz?

    ¿Y el saldo de cuatro presuntos delincuentes en Joachín, entre los municipios de Tierra Blanca y Tlalixcoyan, el viernes 15 de marzo?

    Los cuatro hombres caídos en la congregación de Joachín habrían pertenecido al Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG).

    En Cosoleacaque, municipio conurbado con Minatitlán y Coatzacoalcos, fue rafagueado un domicilio durante el enfrentamiento entre bandas rivales con saldo de cuatro sicarios abatidos.

    En sólo tres noches y dos días murieron tres policías y ocho delincuentes en las zonas centro y sur veracruzanas.

Sin embargo, no fue todo.

    El sábado fue baleado a domicilio el síndico de San Pedro Soteapan, población indígena de la etnia Popoluca.

    A Crisanto Bautista Cruz se le trasladó a una clínica y el domingo era reportado vivo pero no se ofrecían detalles sobre la gravedad que recibió la víspera.

    El domingo un ganadero nativo de Las Choapas, en los límites de Veracruz con Tabasco y Chiapas, apareció ejecutado luego de su secuestro una semana atrás.

    La misma jornada dominical y sangrienta se amplió en Agua Dulce -límites con Tabasco- al hallarse el cuerpo de una mujer hecho pedazos y arrojado a un basurero dentro de bolsas de plástico.

    Un feminicidio más de los muchos que se cuentan desde tiempo atrás.

    Hubo más, mucho más: la población civil fue asediada, acosada, agredida, sumida en condiciones de psicosis en Córdoba, Tierra Blanca, Cuitláhuac, Yanga, Acayucan, Coatzacoalcos, Jáltipan, Cosoleacaque, Minatitlán, San Juan Evangelista, Las Choapas, Agua Dulce.

    La tarde del viernes 15 de marzo trailers y camionetas fueron incendiados como parte de un bloqueo de la carretera federal La Tinaja-Córdoba, en el centro montañoso veracruzano.

    Las unidades quemadas fueron pintadas con las siglas del CJNG.

    La noche del mismo viernes camiones de pasaje que comunican a los municipios de Acayucan-Jáltipan-Cosoleacaque-Minatitlán-Coatzacoalcos, fueron retenidos en un retén a la altura de la comunidad de Zacatal, municipio de Texistepec…

    Pasajeros y choferes, aterrorizados eran bajados de las unidades y mientras pedían se respetaran sus vidas los delincuentes pintaban los camiones con las letras CNJG y permitían el abordaje y la continuidad del viaje…

    Por redes sociales, ciudadanos de Córdoba reportaban su temor y se aconsejaban unos a otros resguardarse en casa…

    La tarde del viernes, un comunicado oficial de la Secretaría de Seguridad Pública de Veracruz reportaba los sucesos de Tierra Blanca, La Tinaja, Cuitláhuac, Yanga y aconsejaba no viajar por esa zona.

    La noche del viernes hubo bloqueo con unidades incendiadas entre Catemaco y Hueyapan de Ocampo, sobre la carretera 185 que comunica a Mérida con Matamoros, Tamaulipas, y atraviesa cinco entidades del país.

    Se reportó otro bloqueo atribuido al CJNG en La Lima, municipio de San Juan Evangelista, cuyo palacio municipal fue “bañado” a tiros la noche del pasado 22 de febrero.

    Durante esa noche reluciente de violencia 27 camionetas llenas de sicarios persiguieron a policías que, heridos, fueron llevados al hospital de Yanga donde se les quiso rematar, lo cual no ocurrió…

    Se suscitaron, eso sí, sendos ataques a instalaciones de la policía estatal entre la noche del viernes y la madrugada del sábado.

    El primero fue en Tierra Blanca y el segundo en Jáltipan de Morelos.

    Se usaron granadas, así como armas de uso exclusivo del ejército.

    De última hora, la tarde del domingo el diario digital Código Sur reportó amenazas a la base de la Fuerza Civil en Coatzacoalcos; por lo que se habría reforzado la presencia de marinos frente al penal federal Duport Ostion de la antigua población de Puerto México.

Todo lo narrado hasta aquí ocurrió entre la noche del jueves14, así como la mañana y tarde del domingo 17 de marzo.

Con fuentes de reporteros que acudieron a los lugares de los hechos, boletines del gobierno veracruzano, publicaciones en redes sociales, testimonios de víctimas, incluyendo el de gente que viajó hacia una y otra ruta y atravesó entre autos incendiados o fue bajada de camiones que serían pintados con las siglas del CJNG, se armó este reportaje que semeja un parte de guerra.

No aparecen víctimas ni victimarios de otro cártel que no sea el de Jalisco Nueva Generación.

Dicho tema merece análisis aparte porque el pasado cuatro de marzo –a recomendación de la CNDH emitida el 19 de julio del 2017 durante el gobierno de Miguel Angel Yunes Linares- el gobernador Cuitláhuac García Jiménez pidió perdón a los padres de cinco jóvenes desaparecidos en Tierra Blanca  el 11 de enero del 2016, quienes habrían sido asesinados en el rancho “El limón”, municipio de Tlalixcoyan, Veracruz.

Las víctimas tienen nombre y es preciso recordarlo siempre: Susana Tapia Garibo, José Alfredo González Díaz, Mario Arturo Orozco Sánchez, José Benítez de la O y Bernardo Benítez Arroniz.

En la cronología de la tragedia la justicia padece un saldo en contra…

El CJNG disputaba a los zetas el control de la plaza de Tierra Blanca y éstos a su vez mantenían una pugna con Leonardo Hernández Hernández (a) “El brujo”, jefe de plaza del cártel de Sinaloa y/o del cártel del golfo en Playa Vicente, Veracruz, lugar fronterizo con el estado de Oaxaca, asesinado el 28 de abril del 2018…

Policías estatales en el gobierno de Javier Duarte de Ochoa y a la orden del CJNG confundieron a los cuatro muchachos y una muchacha nativos de Playa Vicente -quienes regresaban de un paseo al puerto de Veracruz- con integrantes del grupo delictuoso de Hernández Hernández…

Los detuvieron y los entregaron al CJNG, desde cuyas estructuras de mando surgió la orden de desaparecerlos…

El territorio de Tierra Blanca –no confundir la referencia a su población y al total de sus autoridades- y el CJNG, entonces, constituyen un binomio histórico en el terreno delincuencial…

Otros detalles como el paso obligado de las redes del tren de todo el sureste de la república por este sitio –incluidos migrantes que por su extrema pobreza deben emplear “la bestia”, como se conoce al tren- ayudarían a explicar los sucesos que se replican aquí como ha pasado entre el jueves y el domingo más recientes…

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Cito a Sun Tzu y El Arte de la Guerra:

C A P I T U L O I

“Sobre la evaluación. La guerra es de vital importancia para el Estado; es el dominio de la vida o de la muerte, el camino hacia la supervivencia o la pérdida del Imperio: es forzoso manejarla bien. No reflexionar seriamente sobre todo lo que le concierne es dar prueba de una culpable indiferencia en lo que respecta a la conservación o pérdida de lo que nos es más querido; y ello no debe ocurrir entre nosotros. Hay que valorarla en términos de cinco factores fundamentales, y hacer comparaciones entre diversas condiciones de los bandos rivales, con vistas a determinar el resultado de la guerra. El primero de estos factores es la doctrina; el segundo, el tiempo; el tercero, el terreno; el cuarto, el mando; y el quinto, la disciplina”.

En el libro “el político y el científico” de Max Weber, se lee:

“Desde el punto de vista de la consideración sociológica, ¿qué es una entidad política? Sociológicamente hablando no podemos tampoco discernir el concepto partiendo del contenido de su actividad. Apenas existe una labor que de un modo u otro no haya sido emprendida por una entidad política, así como tampoco existe una labor de la que podamos conceptuar que siempre fue competencia exclusiva de esas corporaciones políticas llamadas hoy en día Estados o de aquellas que históricamente  fueron precursoras del Estado moderno. Sin embargo, sociológicamente cabe definir dicho Estado en relación a un medio determinado que él posee, como toda entidad política: la violencia física. ´Todo Estado se funde en la violencia´ dijo Trotsky”.

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En los primeros cien días del nuevo gobierno de Veracruz, sobresale la guerra.

Sun Tzu afirma: el Arte de la Guerra se basa en el engaño y “la mejor victoria es vencer sin combatir”.

Podemos plantear hipótesis a partir de ese pensamiento del filósofo chino.

En la guerra hay varios frentes y dos de ellos son la guerra psicológica y la guerra mediática.

Resulta imperativa la lectura política de estos conceptos y su aplicación en la batalla para no poder la guerra.

Hay enemigos del Estado dentro del propio Estado.

Un dato: el pasado cinco de marzo fue detenido en Coatzacoalcos Alaín López Sánchez (a) “La liebre”, jefe de plaza de los zetas en el sur de Veracruz y Tabasco, sustituto de Hernán Martínez Zavaleta (a) “El H”, preso.

“El H” habría sido el autor intelectual y su relevo el autor material del multi infanticidio suscitado en la colonia Nuevo Calzadas de Coatzacoalcos el 27 de junio del 2017, cuando mató a balazos a cuatro menores de 3, 4, 5 y 6 años de edad.

Al ser detenido Alían López Sánchez las autoridades estatales descubrieron que no existía orden de arresto en su contra ni tampoco carpeta de investigación.

Es decir, Jorge Winckler no realizó su trabajo en torno a este peligroso sujeto al que se capturó por delitos federales y a quien le surgieron violaciones a la ley del fuero común.

Esta versión fue dada a conocer a www.palabradeveracruzano.com.mx por el secretario de gobierno, Erick Patrocinio Cisneros Burgos, ayer durante la revisión de un retén policiaco en Cardel.