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Es importante registrar, detallar, analizar, lo ocurrido el miércoles 12 de agosto en el Teatro del Estado -en Xalapa- entre Javier Duarte de Ochoa y José Yunes Zorrilla.

Tal encuentro tiene múltiples implicaciones e interpretaciones.

Sobresale el hecho de que ambos son hombres de Poder en Veracruz y mientras Duarte es el Gobernador a sólo 16 meses de marchar, Yunes Zorrilla es Presidente de la Comisión de Hacienda en la Cámara Alta del Congreso y probablemente sustituya hombre del que lo separan marcadas diferencias políticas.

Ha trascendido que el jueves 13 de agosto hubo un segundo encuentro entre Duarte de Ochoa y Yunes Landa.

Ocurrió en el rancho San Julián, en Perote.

Se trató de una reunión privada en la que habrían estado sólo el Gobernador y el Senador.

No hay informe oficial sobre lo que dialogaron pero se afirma que fue un encuentro institucional y el tema financiero habría sido clave.

Las diferencias políticas a fondo marcadas por José Yunes Zorrilla respecto a Javier Duarte de Ochoa continúan, según se informa.

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Ahora bien, resulta muy obvio que el mensaje enviado por Javier Duarte a primera hora de ayer, lunes 17 de agosto, en Palacio de Gobierno, se dirige al pueblo en general pero a un personaje en particular: José Yunes Zorrilla.

Ayer, el gobernador dio por primera vez un acercamiento a la cantidad exacta de la deuda de su gobierno y hoy sabemos que el Estado de Veracruz debe 44 mil 470.8 millones de pesos a instituciones bancarias y organismos financieros públicos y privados por préstamos diversos.

Miguel Alemán Velasco heredó una deuda de sólo 3 mil millones de pesos.

El resto, es decir más de 41 mil millones de pesos se han pedido prestados durante el sexenio de Fidel Herrera  Beltrán y lo que va de la gestión en manos de Javier Duarte de Ochoa.

Los 44 mil 470.8 millones de pesos reconocidos como deuda por Duarte incluyen compromisos financieros de municipios; es decir de aquellos que los tengan porque hay Ayuntamientos veracruzanos que no han requerido préstamos bancarios y sólo administran lo que les envía la federación vía la SEFIPLAN.

A dicha cantidad debemos sumar –sin confundir- los pagos pendientes de proveedores y prestadores de servicio, cuyo monto total sigue en la incógnita.

Si el dato sobre las facturas de proveedores y prestadores de servicio nos fuese revelado y sumáramos esta cantidad a los 44 mil 470.8 millones dados a conocer ayer por el gobernador, la cantidad de pagos pendientes por la administración de nuestra entidad incrementaría de manera notable.

No se confundan, pide Duarte de Ochoa: hay calendario de pagos, se paga y se pagará a proveedores y prestadores de servicios.

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De acuerdo, atendamos el tema sin confusión…

Sólo que, la duda surge: ¿Y cuánto se debe a proveedores y prestadores de servicio?

No es un tema menor: implica saber a cuánto, en realidad, asciende la suma entre deuda financiera y pasivos de gasto corriente de parte del Gobierno del Estado de Veracruz.

Más aún: ¿alcanzará a pagar –antes de concluir- la actual administración estatal a contratistas, medios de comunicación, artistas, proveedores de servicios de salud y alimentos a hospitales, los 1 mil 800  millones que afirma la Rectora Sara Ladrón de Guevara se le deben sólo a la Universidad Veracruzana, etcétera...?

Otra duda:

Si Javier Duarte de Ochoa negó siempre que la bursatilización de las participaciones federales a Veracruz fuese deuda: ¿se incluye en los 44 mil 470.8 millones de pesos el dinero que se paga a las empresas financieras que bursatilizaron nuestras participaciones; o eso es aparte?

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Para efectos del análisis sobre los encuentros entre Javier Duarte de Ochoa y José Yunes Zorrilla -el miércoles 12 en el Teatro del Estado, en Xalapa y el jueves 13 de agosto en el rancho San Julián, de Perote- vale recordar que el Senador ha dicho una y otra vez, a lo largo y ancho de la entidad, que Veracruz enfrenta un déficit financiero mensual que oscila entre los 800 y 900 millones de pesos.

Cada año, nuestra entidad enfrenta un déficit de 12 mil millones de pesos, le informa, le explica el Presidente de la Comisión de Hacienda en el Senado a quien le pregunte sobre el tema.

El manejo mediático y político, el control informativo, las múltiples interpretaciones que se le dan a estos datos, las declaraciones y boletines que se emiten para contrarrestar las afirmaciones están ahí pero no frenan los argumentos con datos duros del legislador nacido en Perote y que quiere gobernar Veracruz.

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Aquella tarde del 12 de agosto, sobre el escenario principal del Teatro del Estado, en un evento organizado por el PRI estatal a guisa de desagravio, de respaldo político a Javier Duarte de Ochoa, su encuentro con José Yunes Zorrilla fue frío, distante.

Sí –el reportero estaba a diez metros de la escena- hubo un saludo del gobernador que extendió la mano y encontró la diestra del Senador.

Luego, el propio Duarte palmeó el brazo izquierdo de Yunes Zorrilla que ya no respondió.

No hubo diálogo alguno.

Mucho menos un abrazo.

El PRI -y el grupo de Marcelo Montiel Montiel en particular- realizó un operativo de protección a su correligionario, el gobernador, ante la crisis política con ecos a nivel estatal, nacional e internacional, desatada por el multi homicidio de la colonia Narvarte, en el Distrito Federal el 31 de julio pasado, donde murieron el periodista Rubén Espinoza, la activista Nadia Vera y tres personas más.

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¿Y si José Yunes Zorrilla llega a la gubernatura?

¿Y si Héctor Yunes Landa, aliado –ambos lo remarcan a cada momento- del peroteño, llega a la gubernatura?

¿Y si Miguel Angel Yunes Linares llega a la gubernatura?

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Quedan ahí las fechas y los hechos concretos: 12 de agosto: un saludo frío; el 13 de agosto la reunión privada que se reflejó en el mensaje de Javier Duarte el lunes 17 de agosto, sobre el tema de la deuda estatal.

Lunes –también- de mensaje emitido por Luis Videgaray Caso, Secretario de Hacienda a nivel federal, sobre el control que habrá -a partir de ya- en el tema de los préstamos para estados y municipios.

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A nivel nacional México no enfrenta problemas de sobreendeudamientos estatales y municipales porque representan apenas el 2.9 % del Producto Interno Bruto (PIB) declaró el Secretario de Hacienda, amigo por cierto del Senador Yunes Landa.

Si se compara con otros países -Argentina 7 % del PIB, Brasil 12 % o Estados Unidos 18 % del PIB- el de México es un porcentaje –en general- bajo, explicó Videgaray.

Sin embargo, el propio titular de las finanzas públicas nacionales admitió que entre el 2008 y el 2013 la deuda de estados y municipios tuvo un crecimiento acelerado al pasar del 1.7 al 3.1 del PIB.

Además, añadió, existe una minoría de entidades federativas que presenta ya niveles muy altos de endeudamiento o problemas financieros para el pago de proveedores y contratistas.

Con precaución política, Luis Videgaray Caso no menciona cuáles son las entidades con problemas de pago o de endeudamiento.

¿Con 44 mil 470.8 millones de deuda a los que hay que sumar los pasivos cuyo monto no se revela: Veracruz está entre esa minoría de entidades aludidas por Videgaray?

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Hay más fechas clave que surgen a partir de la lectura de los encuentros entre Duarte de Ochoa y Yunes Zorrilla: Primero de diciembre del 2016 y Primero de diciembre del 2018.

En ambos casos habrá relevo de Gobernador en Veracruz.

¿Serán momentos de simple sucesión, de confrontación o serán momentos de fatalidad política?