Orizaba, Ver. – Treinta y dos horas de vuelo, cuatro días de travesía pasando por Corea del Sur y Filipinas, un vuelo nacional al centro de la isla, y cuatro horas más por carretera, fue el camino que recorrió la alpinista orizabeña Ishtar Rizzo para conquistar el Monte Giluwe, el volcán más alto de Oceanía con 4 mil 368 metros Milenio. 

La expedición planeada para seis días se redujo a dos debido al mal clima, ya que en Papúa Nueva Guinea es un lugar donde llueve 300 de los 365 días al año. Un espacio de seis horas con cielo nublado, pero sin lluvia fue la única oportunidad de la alpinista para ascender. 

A las 4:00 de la madrugada, tras una noche de tormenta,  Ishtar Rizzo comenzó el ascenso al Monte Giluwe. Para el amanecer ya estaba en la cima, aunque con visibilidad cero y ondeando la bandera del Pueblo Mágico de Orizaba, sobre un volcán nunca antes escalado por una mexicana y la sexta cumbre completada en su proyecto Mujer de Fuego.

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Antes del ascenso, el jefe de la tribu Hagen en la villa Paiya se enteró de su misión y la recibió personalmente.

- "No habíamos conocido una persona tan determinada", le dijo.

- "Así somos los mexicanos: trabajadores, soñadores y aferrados", respondió la alpinista.

Durante su estancia, tuvo oportunidad de conocer otras tribus indígenas como los Huli y los Asaro, algunas con pasado cultural caníbal, en un territorio que representa menos del 1% de la superficie terrestre pero alberga aproximadamente el 6% de toda la biodiversidad del planeta Milenio.

"Llevar mi casa hasta la cima significa mucho para mí. Mi propósito es inspirar a más mujeres a perseguir sus sueños e ir por aquellos retos que, por muy inalcanzables que parezcan para los demás, tengan sentido para ellas".

El próximo objetivo de la alpinista orizabeña Ishtar Rizz es el Monte Sidley en la Antártida, para completar el reto de Mujer de Fuego, Mujer de Acero: los siete volcanes más altos del mundo, el más alto de cada continente.

(AA)