Xalapa, Ver.— La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo informó que el gobierno de México abrió una investigación por el derrame de hidrocarburo ocurrido en el río Pantepec, al norte de Veracruz, tras la fractura de un ducto de Pemex que habría cedido a causa de un deslave posterior a las lluvias recientes.

Durante su conferencia matutina, la mandataria detalló que la fuga fue detectada el pasado viernes, momento en el que Pemex cerró de inmediato las válvulas del oleoducto Poza Rica–Madero; sin embargo, reconoció que la descarga inicial de crudo fue considerable.

“Fue el viernes cuando ocurrió la fuga. Pemex cerró las válvulas de inmediato, pero aun así hubo una salida importante de hidrocarburos”, declaró Sheinbaum.

La presidenta adelantó que la Secretaría de Marina (Semar) y personal especializado realizan trabajos de confinamiento y saneamiento en el cauce del río.

“Está la Marina, está la logística de Pemex; ayer estuvo el director de Pemex verificando que se estén aplicando todas las medidas, primero en el río y después en el manglar”, añadió.

Como parte de las acciones emergentes, se suspendió la captación de agua potable en la zona del incidente y se enviaron pipas a las comunidades aledañas, principalmente en el municipio de Tuxpan.

Respecto a las causas del siniestro, Sheinbaum explicó que el desprendimiento de tierra no ocurrió durante la tormenta más intensa, sino días después, aunque aclaró que será necesario un dictamen técnico para confirmarlo.

“La causa aparente es un deslave, pero tendrá que investigarse”, subrayó.

Por su parte, Petróleos Mexicanos (Pemex) informó que desplegó más de 80 unidades terrestres y acuáticas, además de 48 cordones oleofílicos, 13 barreras marinas y dos skimmers para la recuperación del crudo. La empresa estatal aseguró haber reparado la línea y reactivado el oleoducto Poza Rica–Madero.

No obstante, habitantes de la zona reportaron que la mancha de petróleo se extendió por más de ocho kilómetros y que las labores de limpieza aún no cubren la totalidad del cauce.

El Gobierno federal reiteró que mantendrá el monitoreo ambiental y sanitario en la región hasta lograr la contención completa del derrame y garantizar que no exista riesgo para la población.