Poza Rica, Ver.— Con un bloqueo en el bulevar Adolfo Ruiz Cortines, habitantes de la colonia Santa Emilia de Poza Rica exigieron su inclusión en el censo de damnificados que realiza la Secretaría de Bienestar.

Los manifestantes señalaron que también resultaron afectados por las recientes inundaciones en la zona, provocada por el desbordamiento del río Cazones.

Los afectados denunciaron que, a pesar de los daños sufridos en sus viviendas, no han recibido ningún tipo de apoyo institucional a pesar de que ya pasaron cinco días de las afectaciones.

Durante más de una hora, interrumpieron el tránsito vehicular en una de las principales vías de la ciudad petrolera, generando caos vial. El reclamo se derivó de la exclusión y afectaciones a la salud.

Los vecinos señalaron que varias personas de la colonia Santa Emilia presentan problemas en la piel y gastrointestinales, derivados del contacto prolongado con agua contaminada y lodo tras la inundación.

“Estamos olvidados, nadie ha venido a censarnos ni a ver cómo estamos”, expresaron algunos de los inconformes.

El censo de damnificados

El bloqueo fue levantado tras un diálogo con la delegada regional de Bienestar, Estefani Galassi, quien exhortó a la población a tener paciencia y aseguró que el censo continúa en proceso. 

Según Galassi, en la ciudad de Poza Rica ya se han registrado más de cinco mil habitantes damnificados. Agregó que el censo continuará para tener con mayor certeza el número total de afectados.

Las inundaciones

De acuerdo con los manifestantes, la madrugada del pasado viernes 10 de octubre las aguas del río Cazones comenzaron a desbordar. Según las familias, el nivel llegó a los nueve metros en las partes bajas como Las Granjas parte Alta.

Las corrientes arrastraron todo, desde los cimientos a casas; sepultaron vehículos, los atoraron en los techos, puertas y ventanas; una tragedia que además dejó personas muertas y otras más desaparecidas.

(BRLH)