Coatzacoalcos, Ver.- El cobro de piso ha adoptado una nueva modalidad en el sur de Veracruz. Ahora, grupos delictivos se hacen pasar por representantes sindicales para extorsionar a empresas proveedoras que operan en la zona industrial de Coatzacoalcos.

Renato Riveroll Rivera, director del Observatorio Ciudadano de Coatzacoalcos, advirtió que esta práctica ha escalado con rapidez, generando preocupación entre el sector empresarial, donde ya se han registrado amenazas, atentados y bloqueos.

“El problema es que estos delincuentes se presentan como sindicalizados, pero no lo son. Son integrantes de grupos delictivos que cobran cuotas bajo amenaza. Si no se accede al pago, hay represalias contra las instalaciones o el personal. La situación se ha vuelto sumamente compleja; es un cáncer social”, señaló.

De acuerdo con testimonios recogidos por el Observatorio, las cuotas impuestas por estos falsos sindicatos pueden ser exorbitantes y se aplican por cada centro de trabajo. Los extorsionadores llegan a las entradas de obras o instalaciones industriales y bloquean el acceso hasta que los dueños acceden al pago.

En caso de ser descubiertos como impostores, intimidan a sus víctimas con amenazas y los obligan a “alinearse” o enfrentar consecuencias violentas.

“Dicen que son del sindicato y no dejan pasar a los trabajadores hasta que los dueños paguen”, relató un testigo.

Uno de los casos más recientes fue el atentado contra la empresa del dirigente local de la Canacintra, Raúl Prieto Leal, quien fue blanco de un ataque tras negarse a pagar las cuotas exigidas por estos grupos.

“Esto comenzó recientemente. Estos grupos se hacen pasar por sindicatos, pero no lo son. Los verdaderos sindicatos tienen procedimientos establecidos con las empresas. Estos falsos desplazaron a los legales, lo cual es muy delicado y grave”, alertó Riveroll.

El impacto de esta modalidad delictiva ya se refleja en el desarrollo industrial del sur de Veracruz. Según el Observatorio, si no se garantiza seguridad para proveedores y trabajadores, podría haber consecuencias económicas importantes.

Por ello, Riveroll reiteró la necesidad de crear una unidad especializada contra la extorsión, como en su momento se hizo con el secuestro, delito que se logró contener mediante una estrategia específica.

“El delito de extorsión lleva años afectando a la región. Sin una respuesta contundente, seguirá frenando el crecimiento económico de Coatzacoalcos”, concluyó.