Veracruz, Ver.- Después de casi seis años sin albergar un juego de fútbol profesional, el estadio Luis “Pirata” de la Fuente reabrió sus puertas la noche del sábado 17 de mayo para recibir las finales de los torneos Kings League Openbank Americas y Queens League Oysho Americas.

El "Coloso" del Fraccionamiento Virginia, ubicado en Boca del Río, volvió a vibrar con el entusiasmo de miles de aficionados que celebraron el regreso del fútbol al icónico inmueble veracruzano.

El último partido oficial que se jugó en este estadio fue el 8 de noviembre de 2019, cuando los Tiburones Rojos de Veracruz fueron goleados 5-0 por el Club América en un encuentro correspondiente a la Liga MX. Poco después, el equipo fue desafiliado por la Federación Mexicana de Fútbol (FMF) el 4 de diciembre de ese mismo año, debido a problemas financieros, adeudos con jugadores y personal, así como una gestión deficiente bajo el mando del empresario Fidel Kuri Grajales.

Kuri Grajales fue detenido en septiembre de 2021 por el delito de fraude, y aunque obtuvo un amparo que le permitió continuar su proceso en libertad en octubre de 2022, fue reaprehendido en 2023, acusado de fraude procesal, y actualmente permanece en prisión.

Tras la desafiliación del equipo y la salida del fútbol profesional, el estadio cayó en el abandono. No fue sino hasta 2022 que el Gobierno del Estado de Veracruz, bajo la administración de Cuitláhuac García Jiménez, decidió intervenir. Se invirtieron mil 676 millones 466 mil 826 pesos en su rehabilitación, transformándolo en un recinto moderno y funcional.

El regreso del fútbol se celebró en un ambiente de fiesta. Los boletos para las finales de la Kings y Queens League se agotaron con días de anticipación, y el público veracruzano respondió con entusiasmo a esta nueva etapa del estadio. Aunque el torneo no es avalado por la FIFA, se trató de una serie de encuentros de soccer que marcaron un hito para el “Pirata” Fuente, al devolverle su vocación deportiva y su lugar en el corazón de los aficionados.