El Día Mundial del Pan, celebrado cada 16 de octubre desde el 2005, fue establecido por la Federación Internacional de Panaderos (UIB) para rendir homenaje a uno de los alimentos más básicos y consumidos en el mundo. Esta fecha coincide con el Día Mundial de la Alimentación, lo que subraya la relevancia de este alimento en la dieta humana.

El pan es un elemento clave en la mesa de muchas culturas alrededor del mundo. Con más de 100 mil tipos diferentes, su diversidad se debe a factores como los ingredientes locales, los métodos de cocción y las tradiciones. Aunque su base es simple (harina, agua y levadura), hacer un buen pan implica conocimientos sobre fermentación, temperatura y hasta el clima, demostrando la complejidad detrás de su elaboración.

Beneficios del pan para la salud

Más allá de su sabor y versatilidad, el pan ofrece varios beneficios para la salud:

• Aporte energético constante: Sus carbohidratos proporcionan energía sostenida.
• Fuente de fibra: Las variedades integrales ayudan a mejorar la digestión.
• Rico en nutrientes: Contiene vitaminas B, hierro y minerales esenciales.
• Prevención de enfermedades: Ayuda a regular el peso y puede prevenir enfermedades como la diabetes y problemas cardiovasculares.
• Propiedades antioxidantes: Retrasa el envejecimiento celular y fortalece el sistema nervioso.

¿Cuánto pan se debe consumir?

La Organización Mundial de la Salud recomienda una ingesta diaria de 250 gramos de pan. Lo ideal es repartir su consumo entre diferentes comidas, especialmente en el desayuno y la comida, cuidando siempre la combinación con otros grupos alimenticios para una dieta equilibrada.