Xalapa, Ver.- La excomisionada presidenta del Instituto Veracruzano de Acceso a la Información (IVAI), Yolli García Álvarez, habló del bloqueo institucional que tuvo respecto a información pública, lo que le ocasionó confrontaciones con el gobierno de Cuitláhuac Garcia Jiménez. También exhibió el abuso de poder que la llevó a estar detenida sin pruebas durante tres años. 

 

Yolli García Álvarez compartió su experiencia en el Quinto Congreso Nacional de Transparencia, organizado por el Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), donde hizo la presentación del libro “La debida clasificación de la información pública”. 

 

Durante su ponencia, habló de las polémicas en las que fue involucrada por la actual administración y recordó las polémicas que se suscitaron en el manejo de información del DIF estatal, el arrendamiento de patrullas por parte de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) y el parentesco del mandatario con Eleazar Guerrero, exsubsecretario de Finanzas y candidato a una diputación federal por la vía plurinominal en el actual proceso electoral.

 

La extitular del IVAI también describió cómo fue detenida y señaló que solo fue por hacer su trabajo, ya que no existían pruebas que la inculparan. 

 

 

En ese sentido, lamentó que su pasado sea un ejemplo del proceder del actual gobierno con los órganos autónomos que, afirmó, son ocupados para perseguir a quienes realizan su trabajo.

 

Yolli García Álvarez fue  encargada del IVAI en las administraciones de Javier Duarte, Miguel Ángel Yunes Linares y Cuitláhuac García. Comentó que un día antes de finalizar su mandato como comisionada del IVAI, recibió una invitación de su sucesora, Naldy Patricia Rodríguez Lagunes para reunirse en un café a la mañana siguiente.

 

“Quiero verte en un café, vamos a platicar y vamos a la entrega recepción (propuso Naldy), el día que me citan llego yo en el inicio de la pandemia, llego y cuando llego a estacionarme ahí se para la Policía Ministerial atrás de mi”, indicó.

 

García Álvarez mencionó que aceptó la invitación confiada en que no enfrentaba ningún problema legal tras dejar el cargo y perder el fuero. Además, no reiteró que nunca la acusaron de un delito que ameritara prisión preventiva.

 

Esta detención marcó el inicio de una prolongada batalla legal contra la Fiscalía General del Estado (FGE). García Álvarez fue acusada inicialmente de nombrar de manera indebida al titular del órgano de control del IVAI y, posteriormente, de no designar personal en esa misma área, lo que llevó a dos carpetas de investigación. 

 

Más adelante, enfrentó una acusación de peculado por la compra de bienes que, según la fiscalía de Veracruz, realizó durante su mandato, aunque ella aseguró que dichos bienes fueron adquiridos antes de asumirh el cargo de comisionada.