Veracruz, Ver.— Desde hace 15 años, el actor veracruzano Aldo Franco interpreta a Jesús de Nazareth en distintas escenificaciones sobre la pasión y muerte de El hijo de Dios, un papel del cual se siente honrado y maravillado.

Ser el personaje principal del viacrucis no es fácil, reconoce el joven, de 36 años. Cada que le toca cargar la cruz de madera se mete tanto en el personaje que llega a sentir el dolor que sintió Jesús antes y durante su crucifixión, asegura.

“Se cumplió el trabajo que al final es la concientización, la representación de Jesús, de lo que sufrió en la cruz, es algo bastante fuerte la verdad, como actor se siente un dolor por dentro cargar esa cruz, es un compromiso y es algo maravilloso, es una honra poder representar a Jesús”, dice.

Aldo Franco participó en la representación de la pasión y muerte de Jesucristo, que se celebró por calles del centro histórico de la ciudad de Veracruz, como parte de las actividades religiosas por Semana Santa la mañana de este viernes 29 de marzo

La actividad religiosa fue organizada por la Diócesis de Veracruz. Para la interpretación de los principales personajes de la historia se contó con el apoyo de 12 actores del Grupo Teatral La Divina Comedia.

A Aldo Franco le tocó ser, una vez más, hacer el papel principal, que, si bien conoce a la perfección, cada que lo desarrolla termina con un sentimiento de dolor.

Se dejó crecer la barba y se colocó una falsa cabellera larga, luego manchó su rostro y parte de su espalda con pintura roja para simular la sangre. Otro joven actor, encargado de interpretar a un soldado romano, fue quien lo flageló con un látigo de juguete.

“Yo ya llevo una preparación desde hace tiempo y ahorita nosotros somos el taller de La Divina Comedia y bueno, vinimos a la Catedral para hacer este viacrucis, pero yo ya llevo una preparación de mucho tiempo atrás”, relata.

El contingente de actores que interpretaron a María, los apóstoles, soldados romanos y pueblo judío salió de la zona de la Macroplaza del Malecón de Veracruz, avanzó sobre la avenida Mario Molina y se incorporó a la avenida Independencia hasta detenerse en los bajos de la Catedral.

El viacrucis concluyó con una escenificación de la crucifixión de Jesús, interpretado por Aldo Franco, quien inició su carrera como actor a los 18 años.

“Es una satisfacción personal y ahorita, tengo todavía ciertos sentimientos y aunque uno actúa, pues es un papel que sí nos deja una conciencia, hacemos conciencia y sentimos parte de ese dolor que él sintió”, concluye.