Papantla, Ver.- La campana de la Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción, ubicada en el centro del pueblo mágico de Papantla, fue bajada de la torre donde se ubicó por 84 años para servir a los feligreses católicos que atendieron su llamado para acudir a misas y celebraciones propias de la religión.

Para bajar la pesada campana, se requirió de la contratación de una empresa con equipo especial, también se contó con la presencia de elementos del Escuadrón Nacional de Rescate y de personal de Protección Civil municipal que vigilaron que todo se hiciera de manera segura para los presentes que acudieron a presenciar este significativo evento para la comunidad religiosa.

El párroco de la iglesia, Constantino Rodríguez Reyes, recordó que la campana de pesa más de dos toneladas, fue colocada en la torre de la iglesia desde el año 1940 y no había recibido mantenimiento desde entonces, por lo que fue dañada en su estructura ante los innumerables repliques en todos estos años.

Por esta razón, detalló, la campana será fundida para dar paso a una nueva que pueda ser colocada en la torre en aproximadamente tres meses, lo que tendrá un costo aproximado de 450 mil pesos, por lo que solicitó el apoyo de la feligresía ya sea con algún donativo o alguna prenda de oro o plata que ya no utilicen para que sirva para la fundición.

Ante el anuncio de que la campana sería bajada de la torre, muchos curiosos se dieron cita en el atrio de la iglesia, así como miembros de la comunidad religiosa y niños que portaron globos blancos.

La iglesia más importante de Papantla

La Iglesia de Nuestra Señora de la Asunción se encuentra ubicada a un costado del mural de la Cultura Totonaca sobre una pequeña colina, esta construcción es considerada el edificio religioso más importante de Papantla.

Su fachada es muy sencilla, pero cuenta con elementos muy significativos, como la decoración de sus cenefas que cuentan con detalles de la flor de vainilla, característica de este municipio y el símbolo de Nahui-Ollin, se sabe que su construcción data del siglo XVIII y fue construida por la orden franciscana.