Veracruz, Ver.—El azolvamiento de la bocana del río Jamapa afecta a los lancheros de Boca del Río que ofrecen recorridos turísticos a lo largo del efluente. Declaran que ahora les resulta complicado salir a navegar con un nivel de agua tan bajo.

Martín Enríquez, integrante de la cooperativa de lancheros La Pequeña Venecia, tiene 40 años de experiencia en el negocio de los recorridos turísticos. 

Su trabajo consiste en operar una lancha y servir como guía de turistas. A bordo de su embarcación recorre río arriba el afluente del Jamapa para que sus clientes conozcan un poco sobre la historia de Boca del Río y disfruten de la naturaleza. 

No obstante, desde hace unos meses comenzó a dificultarse la navegación en la desembocadura del río. El exceso de sedimento, arena y piedras, fenómeno que se conoce como azolvamiento, comenzó a afectar su trabajo. 

Indicó que el nivel del agua en la bocana, donde desemboca el río Jamapa al mezclarse con el mar veracruzano, es tan bajo que en ocasiones los cascos de las lanchas se golpean con las rocas del fondo. 

Mencionó que el ejemplo más claro del azolvamiento en la desembocadura es la playa que se formó a un costado de plaza Banderas y a unos metros del Palacio Municipal de Boca del Río. 

“Prácticamente, es una playa aquí atrás del palacio, ahorita se ve más porque está muy baja la marea, pero sí baja bastante el agua”, declaró. 

Dijo que en sus cuatro décadas de experiencia como lanchero no había visto un fenómeno tan grave como el que se ve en la actualidad. 

“A nosotros nos afecta, afecta la actividad turística. Ahora embarcamos hasta allá, hasta medio río”, dijo. 

Consideró urgente que las autoridades de los tres niveles de gobierno apoyen con el dragado de la desembocadura para prevenir que el azolvamiento siga afectando a los prestadores de servicios turísticos y a los pescadores de Boca del Río. 

Recientemente, las autoridades municipales de Boca del Río informaron que el dragado se llevará a cabo cuando concluyan los trabajos de desmantelamiento del Buque Cañonero Guanajuato, dentro de un par de meses. 

“Ojalá que nos volteen a ver, que le echen a la draga para limpiar un poco la bocana y permitir que fluya mejor el agua porque el nivel está muy por debajo de lo normal, además de que no ha llovido en la montaña y por eso no baja el agua, porque no hay”, agregó.