Veracruz, Ver. - Este jueves 30 de noviembre, en redes sociales se confirmó la muerte de Ana María Carreto Sánchez, la lideresa de la colonia popular del puerto de Veracruz "Ana Carreto". 

La regidora del Ayuntamiento de Veracruz, Belem Palmeros Exsome, compartió una esquela en su página de Facebook dándole el pésame a la familia de la ciudadana. 

"Ana Carreto fue una mujer que siempre procuró el bien de su comunidad. Siempre vamos a admirar su liderazgo y la recordaremos con mucho respeto y cariño. Un abrazo a familiares, amigos y todo el priísmo de Veracruz, descanse en paz". 

Por su parte, Maricela Morlet Cienfuegos, secretaría General del Comité Directivo Municipal del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en Veracruz, también envió condolencias a la familia de Carreto Sánchez. 

"Lamento el sensible fallecimiento de la Sra. Ana Carreto, a quien siempre se le recordará como una luchadora social. Envío  mis sentidas condolencias a familiares y amigos, deseándoles pronta resignación. Q.E.P.D". 

La muerte de Ana Carreto fue consecuencia de una enfermedad que padeció durante varios años. 

La lideresa de los invasores

En septiembre de 1996, Ana María Carreto Sánchez y un grupo de aproximadamente 300 personas invadieron un terreno de dos hectáreas ubicado en la colonia Loma de Tarimoya. 

Los paracaidistas se asentaron en el predio y comenzaron a construir sus viviendas con cartón, madera y láminas viejas. 

En su honor, el terreno invadido por las familias fue bautizado como la colonia "Ana Carreto" de la ciudad de Veracruz. 

Sin acceso a servicios básicos, los colonos colgaron "diablitos" de los cables de alta tensión para obtener energía eléctrica e hicieron conexiones clandestinas para que a sus humildes hogares llegara el agua potable. 

Con el paso de los años, según estimaciones, más de 800 familias se asentaron en la colonia "Ana Carreto". También creció la delincuencia en la zona. 

No obstante, las acciones de la lideresa de los invasores tuvieron consecuencias y en el año 2002 fue detenida y encarcelada en el entonces penal de Allende de la ciudad de Veracruz por los delitos de invasión y fraude. 

Un año después, en el 2003, Ana Carreto fue liberada y exonerada de los delitos que presuntamente cometió. 

Desde que se adueñó del predio de dos hectáreas en el año de 1996 y hasta sus últimos años de vida, Ana Carreto luchó por la regularización de la colonia para que pudiera recibir servicios básicos como alumbrado público, agua potable y alcantarillado. 

Durante décadas Ana Carreto destacó por ser militante de hueso colorado del PRI, sin embargo en el año 2021 por diferencias con el instituto político decidió renunciar.