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Nácara, el rico pez que capturan en canoas y con matayahual en Mina

  • Heidi Castellanos
La temporada es corta y tanto pescadores como consumidores la aprovechan al máximo, aseguran que es un manjar

Coatzacoalcos, Veracruz.- La nácara es un pequeño pez considerado un manjar en el sur de Veracruz. La tan esperada temporada dio inicio y como cada año, los pobladores con ayuda de canoas y un matayahual salen al río Coatzacoalcos en busca de esta especie. 

En la localidad Las Ánimas, zona rural de Minatitlán, tanto pescadores como amas de casa, aprovechan la buena pesca de este año, ya sea para venta o consumo.  

Pescadores explicaron que con el desbordamiento de lagunas y pantanos por las lluvias recientes, este pez llega hasta el río Coatzacoalcos y es cuando se puede capturar, ya que entre el agua revuelta llegan en grandes cantidades.  

 “Viene abajo del agua, entonces nosotros metemos el matayahual o la red como le llama algunos y ahí sale las nácaras”, comentó el pescador, Abel Torres Hernández.

Capturarlas aseguran que es fácil, basta sumergir con las manos el matayahual o la red para sacarlas.  Las amas de casa como Martha también acuden al río, ella las pesca  para consumo y  cada año esperan esta temporada para poder comerlas en diferentes platillos. 

 “Yo nada más las hago fritas, a veces asadas en hoja de plátano, en tamalito, con pica de gayo, frijoles, bien tostaditas, al abuelito de mi hija le gustan en caldo”, detalló Martha Simón.  

Pescadores explicaron que durante los primeros días se pueden capturar hasta cien kilogramos en una hora, y si se quedan más tiempo, logran llenar tres canoas. También es cuando más especies traen huevas: en esas condiciones son más buscadas, porque aseguran sabe más rico.  

Pese a la demanda, esté pez se comercializa a bajo costo. En la zona rural de Minatitlán se pueden compra un tambo de diez kilogramos en cien pesos, mientras en mercados o sobre el malecón ribereño en la zona urbana, una medida (jícara) ronda entre los 25 a 30 pesos. 

“A veces se llena hasta dos tres chalupas de estas, cuando viene la lluvia, uno ya sabe, ya viene la nacara, la gente todos están alegres ya vamos a comer nácaras”, agregó Abel. 

Aunque descamarlas  y limpiarlas  es tedioso al ser tan pequeñas, los minatitlecos aprovechan a degustarlos en esta temporada porque solo se encuentran a finales de octubre y principios de noviembre, incluso algunos los ahúman para poder conservarlas  más tiempo y tener para otros meses, o enviarlos a sus familiares que están en el norte del país.