• Cultura

Xalapa en la independencia: de Diego Leño a Ma. Teresa Medina

  • Francisco de Luna
Xalapa fue uno de los sitios importante durante el desarrollo del movimiento de independencia iniciado por el cura Miguel Hidalgo

Xalapa, Ver.-El municipio de Xalapa vivió uno de los momentos que marcaron la historia de México: el movimiento de independencia en los primeros años del siglo XIX. Uno de los precursores en lo que hoy es la capital de Veracruz fue Diego Leño.

Fungía como síndico del ayuntamiento y, según la historia, dos años antes del levantamiento armado tuvo tratos con Francisco Primo de Verdad y Ramos, así como con Juan Francisco Azcárate, próceres de la Independencia de México.

Diego Leño perdió su fortuna durante las luchas independentistas. Entre los datos de su biografía se encuentra que compró el Molino de Lucas Martín y lo transformó en venta para la ruta Veracruz-Ciudad de México. 

“Fiel de la Renta del Tabaco en Paso de Sedeño. Regidor Llano de Xalapa, puesto que vendió. Síndico y procurador de Xalapa (1808). Encargado del abasto de carnes. Colaboró con el Virrey Iturrigaray (1808) y lo hospedó en su casa a su caída, de paso hacia San Juan de Ulúa”.

También destaca que acuñó monedas para darlas al pueblo y cooperó en las memorias que se publicaron sobre la jura a Fernando VII. Entre los visitantes de su hacienda estuvieron el emperador Agustín de Iturbide, el general Antonio López de Santa Anna y los notables de la época.

Diego Leño fue el director del primer movimiento político hecho por la Independencia de México y actualmente una calle en el centro de la ciudad de Xalapa lleva su nombre en memoria por su lucha.

En la hacienda de Lucas Martín también dio asilo al virrey José Joaquín Vicente de Iturrigaray y Aróstegui, cuando fue destituido de su cargo; entonces fue perseguido cuando huía al puerto de Veracruz, porque supuestamente los leales a la corona española querían asesinarlo.

LA DAMA INDEPENDENTISA EN XALAPA

Otro de los personajes interesantes de Xalapa que participaron en la Independencia fue María Teresa Medina de la Sota Riva, quien apoyó la formación de una junta insurgente en 1812 y la sostuvo económicamente. 

María Teresa Medina nació el 17 de mayo de 1784, en una de las casas donde actualmente es el Barrio Mágico de Xallitic en el centro de Xalapa. Fue una madre, ama de casa y algunos la mencionan como la promotora de la Independencia.

A sus 20 años, la joven vivía la época donde las noticias que circulaban difundían información sobre la invasión de Francia a España. Era finales de 1807.

De acuerdo con la información de la Red Internacional Mujeres Haciendo Historia, cuando el virrey Iturrigaray llegó a Xalapa, a María Teresa le fascinaron las aventuras de los oficiales y le parecía natural pensar en la creación de un gobierno autónomo.

 

Por esto, al enterarse del levantamiento de Miguel Hidalgo y Costilla decidió apoyar y todas las reuniones se llevaron a cabo en su casa, aun con la advertencia de que su marido no podría lograr defenderla si se involucraba demasiado.

Teresa ofreció su casa para una junta secreta que tenía como objetivo participar activamente en el Movimiento Insurgente; quedaron al frente de las reuniones Vicente Acuña, Evaristo Fiallo y Juan Bautista Ortiz, a quienes acompañaban otros varios rebeldes como Mariano Rincón o Ignacio Paz.

En libros como “El umbral”, ‘María Teresa de Medina, la dama insurgente’, elaborado por Roberto Peredo, se menciona que la xalapeña puso en riesgo hasta su matrimonio por seguir sus ideas independentistas. 

Cuando las autoridades virreinales descubrieron a la junta, los insurgentes huyeron de Xalapa y se piensa que María Teresa Medina fue salvada de morir por su hermano, el general Antonio de Medina y Miranda, pero obligada a trasladarse a la ciudad de México.
 

MORELOS EN VERACRUZ

Dentro de los planes del general José María Morelos y Pavón estaba conquistar la vasta y montañosa zona del sur y del sureste de la república, lo que suponía la ocupación de las plazas de Acapulco y Oaxaca. De igual forma, otro de sus alcances era cortar las comunicaciones que había entre la capital y el puerto de Veracruz, lo que implicaba que se tuviera que ocupar también la plaza de Puebla o de Orizaba.

En Tehuacán, Puebla, se enteró de la situación defensiva en que se encontraba la plaza de Orizaba, por lo que se consideró que ese era el momento de actuar con rapidez para tomar la villa, en la cual el gobierno virreinal tenía fuertes sumas de dinero, así como una gran cantidad de tabaco, aparte de que era ocasión para debilitar más al enemigo.

Morelos salió de Tehuacán el día 25 de octubre con un ejército formado por casi 10 mil hombres, los cuales llegaron el 28 de octubre de 1812 a Orizaba, la cual era defendida por el coronel realista José Antonio Andrade, con poco más de 600 hombres. Morelos envió a su representante para intimar la rendición de la plaza, pero el jefe realista se negó a llevar a cabo dicha capitulación.

Al recibir la contestación, las tropas de Morelos avanzaron hasta llegar a 25 metros de la Garita. El coronel Andrade esperaba el ataque; las fuerzas insurgentes fueron recibidas por una descarga de artillería y fusilería, causándoles grandes pérdidas, por lo que las fuerzas de Morelos retrocedieron para rehacer la acometida. Esperó a que las fuerzas de Santa Catarina y San Cristóbal llegaran a sus posiciones.

Ordenó a Hermenegildo Galeana el ataque frontal y él mismo dirigió a la columna de Santa Catarina para tomar el Cerro del Borrego, desde cuyo sitio emplazó su artillería e inició el fuego sobre la ciudad. Ante los fuegos de Galeana y de Morelos, el coronel José Antonio Andrade determinó la salida de la ciudad de sus hombres. A las 11:00 de la mañana Morelos era dueño de Orizaba.

SANTA ANNA

El 6 de julio de 1810 como simple cadete en el Regimiento de Infantería Fijo de Veracruz, Antonio López de Santa Anna, con 17 años de edad, consiguió ingresar en el Ejército Real de la Nueva España.

En 1811, su regimiento fue convocado para sofocar el movimiento insurgente iniciado por el cura Miguel Hidalgo y Costilla el año anterior, pero debido a la derrota de Hidalgo en la Batalla de Puente de Calderón fue enviado hacia el norte.

Santa Anna nació en la ciudad de Xalapa en el año de 1975. La biografía describe que, desde la proclamación de la Independencia de México en 1821 hasta el afianzamiento de los liberales a partir de 1855, Antonio López de Santa Anna fue la figura omnipresente en la turbulenta vida política del país.

Unas veces en el poder, pues fue 11 veces presidente en periodos cortos, y otras detrás del poder o contra el poder manejando a su antojo los relevos presidenciales y promoviendo con sus intrigas, golpes y revueltas de todo signo.

Ingresó muy joven al Ejército Real de la Nueva España y era capitán del ejército español cuando estalló en 1810 la insurrección anticolonial liderada por Miguel Hidalgo. A lo largo de aquella década, Santa Anna combatió a los independentistas desde el bando virreinal.

El 20 de mayo de 1821, poco antes de consumarse la Independencia Mexicana (27 de septiembre del mismo año), Xalapa fue atacada por las fuerzas de Antonio López de Santa Anna, quien, junto con Joaquín Leño, obligó al capitán español Juan Horbregoso a entregar la plaza.

Consumada la Independencia y siendo emperador de México, Agustín de Iturbide efectúo un recorrido por la zona central del estado de Veracruz. A su paso por Xalapa fue recibido fríamente por el pueblo. 

El 9 de mayo de 1824, siendo presidente de la república Guadalupe Victoria, se instaló en Xalapa la primera legislatura del estado de Veracruz. Ese mismo año Xalapa fue declarada capital del estado. Xalapa fue elevada a la categoría de ciudad, por decreto, el 29 de noviembre de 1830.
 

LA INDEPENDENCIA DE MÉXICO

La Independencia de México es uno de los pasajes más importantes en la historia del país.  Comenzó la madrugada del 16 de septiembre de 1810, cuando el padre Miguel Hidalgo da el llamado “Grito de Dolores” y termina el 27 de septiembre de 1821, es decir 11 años después, con la entrada triunfal del Ejército Trigarante, encabezado por Agustín de Iturbide y Vicente Guerrero, a la Ciudad de México.

La historia de México cuenta que el objetivo principal de este movimiento social era liberar al territorio del yugo español y que, en cada rincón de la colonia, se olvidase por completo el concepto de virreinato.