A ocho años del homicidio del periodista Moisés Sánchez Cerezo, los cuatro apresados por los hechos se encuentran gozando de impunidad.

A la fecha, solo dos personas esperan condena mientras promueven amparos para evitarlo; en tanto que dos más, una vez que fueron liberados, desde octubre y noviembre de aquel año -2015- no se volvió a saber de ellos ni la autoridad volvió a proceder en su contra.

JOSÉ FRANCISCO GARCÍA RODRÍGUEZ

El expolicía estaba adscrito a la zona de El Tejar, en Medellín. El día de los hechos, García Rodríguez se encontraba cerca de la zona donde su sustraído Moisés Sánchez Cerezo en su hogar. Pese a que se había dado un aviso sobre lo sucedido, no actuó en consecuencia.

Por estos hechos, el Juez Tercero de Primera Instancia en Veracruz dictó el pasado 23 de marzo de 2018 la sentencia con base en la causa penal 100/2017.

La pena a la que fue sometido incluyó 25 años de prisión y 332 mil pesos para reparar el daño.
Y aunque se le pretendió imputar como copartícipe del homicidio del periodista, finalmente la acusación y sentencia no soportaron el tamiz judicial de alzada, pues los integrantes de una sala penal en la entidad ordenaron la reposición del proceso.

Lo anterior debido a que el 8 de enero de 2015 un total de 13 policías quedaran sujetos al arraigo, una figura que opera únicamente en aquellos casos de delincuencia organizada (organización de hecho de tres o más personas, para cometer delitos en forma permanente o reiterada).

De acuerdo con la Constitución y el Código Nacional de Procedimientos Penales, el arraigo no podrá exceder de 40 días, y se realizará con la vigilancia de la autoridad del agente del ministerio Público de la federación y la policía que se encuentre bajo su conducción y mando inmediato en la investigación.

Además, podrá prolongarse siempre y cuando el representante social acredite que subsisten las causas que le dieron origen, sin que su duración total exceda de ochenta días.

Ese error ocasionó que la Sala Penal ordenara reponer el proceso sin tomar en cuenta el arraigo, por lo que finalmente la acusación por homicidio no soportó un control judicial efectivo y la sentencia únicamente se emitió por incumplimiento de un deber legal.

La nueva sentencia, de acuerdo con Jorge Sánchez, hijo del fallecido, disminuyó de 25 a solo seis años de prisión.

“Estaban a dos cuadros cuando este comando llega y pasa por ahí y no reaccionan ni dan aviso. El operativo que implementan es hasta dos horas después de la policía de Boca del Río. En el de Medellín el comandante ordena que todos se vayan a la comandancia y continúen con su rutina normal”, indicó Jorge Sánchez.

LUIGUI HERIBERTO BONILLA ZAVALETA

El segundo policía que también fue acusado como copartícipe y al que tampoco se le logró imputar finalmente como tal.

En el momento de los hechos, Bonilla Zavaleta era compañero de José Francisco García Rodríguez y estaba adscrito a la zona de El Tejar.

Igual que su compañero, fue acusado de no actuar en consecuencia cuando el comando armado sacó de su casa al periodista y activista.

En el caso de los dos policías, ambos fueron beneficiados con la resolución de la Sala Penal. Sin embargo, la sentencia fue recurrida y nuevamente se ordenó que sean considerados como copartícipes en el homicidio.

Pero, debido a que han promovido junto a sus defensores diversos amparos para evitarlo, es que a la fecha no tienen sentencia por la muerte del periodista.

MARTÍN LÓPEZ MENESES 

Fue subdirector de la policía municipal de Medellín de Bravo y es el acusado de presuntamente ordenar el secuestro y homicidio del periodista y activista social.

Meneses era en el momento de los hechos, el chofer y escolta personal del entonces alcalde de Medellín de Bravo, Omar Cruz, señalado como autor intelectual del asesinato.
Aunque pisó la cárcel, en noviembre del 2015 salió de prisión gracias a un amparo y desde ese momento, no se volvió a proceder en su contra.

CLEMENTE NOÉ RODRÍGUEZ MARTÍNEZ

Autor material de acuerdo con las indagatorias. El expolicía intermunicipal confesó días después del homicidio, su participación en los hechos. Incluso, afirmó que no sabía que Sánchez Cerezo fuera periodista por lo que pidió perdón a su familia.

Clemente Noé está identificado como el vínculo al que acude Martín López Meneses para terminar con la vida del comunicador.

Rodríguez Martínez señaló en su confesión que un sujeto apodado “El Harry”, quien supuestamente lideraba al grupo que atacó a Moisés, recibió de Martín López Meses la instrucción de desaparecer al periodista. 

El acusado salió de prisión gracias a un amparo obtenido el mismo año de los hechos y no se volvió a saber de él.

EXALCALDE, PRÓFUGO 

Aunque estos han sido los únicos procesados, inicialmente las investigaciones apuntaron a la participación de al menos 13 elementos policiacos municipales.

Además, se indicó que es Omar Cruz Reyes, exalcalde de Medellín, el autor intelectual de los hechos, aunque en su caso no se procedió, dado que al momento que le fue retirado el fuero constitucional para proceder en su contra, se encontraba ya prófugo de la justicia.

fm