El agua de los manantiales brotó sin cesar de la toma Alto Pixquiac en el municipio de Las Vigas. Cientos de miles de litros que abastecerían hogares en la zona norte de Xalapa se vertieron sobre el campo y formaron una laguna cristalina.

En la zona esta semana un centenar de lugareños cerraron las válvulas del acueducto y decidieron acampar sobre el camino a Valle Alegre para que las autoridades “volteen a verlos”. Justificaron que decidieron unirse y frenar el paso del agua tras años de ser ignorados y reparar ellos, de su dinero, algo que le compete a la autoridad.

Sólo exigían que el camino al ingenio del Rosario sea compuesto o asfaltado porque a la fecha se encuentra prácticamente intransitable, con hoyos en todo el trayecto de aproximadamente 10 kilómetros de longitud que perjudican el tránsito de más de 5 mil personas en unas 17 comunidades.

Juan, en voz del resto de los pobladores, declaró que no les quedó de otra que impedir el paso del agua que proveniente de los manantiales en las faldas del Cofre de Perote, aunque la Comisión de Agua y Saneamiento de Xalapa (CMAS) los denunció.

Lamenta que él y el resto de los pobladores hayan sido desacreditados y tachados de delincuentes, cuando en su opinión luchan por el bienestar de personas enfermas y mujeres embarazadas cuyos traslados se complican por el pésimo camino que los comunica con hospitales o centros de salud.

Añade que su movilización también busca generar una salida a sus cultivos debido a que los altos costos en fletes los dejan sin ganancias.

Mientras esto ocurre, desde la capital del Estado, se asocia el movimiento a un golpeteo de la oposición, propiamente del Partido Acción Nacional, según acusó el gobernador, Cuitláhuac García Jiménez, sin embargo, procedieron a reabrir las válvulas este jueves luego de tres días de protesta.

“NO SOMOS TALAMONTES”

Juan, solicitando anonimato, acusó que quienes pretenden difundir la acusación de ser talamontes, son personas que no desconocen por completo la situación.

Precisó que quienes realizan el aprovechamiento de árboles maderables lo hacen a través de programas bien establecidos que son manejados por diversas autoridades, empezando por las de nivel federal, como la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (SEMARNAT).

Además, el programa de aprovechamiento forestal va acompañado de la opinión de ingenieros forestales expertos y autorizados por la dependencia.

“Lo de talamontes lo maneja gente que no tiene ni idea porque más que nada es un aprovechamiento, no es una tala. El aprovechamiento es controlado y además viene condicionado a que tiene uno que reforestar”, sostiene.

Recordó que para el aprovechamiento forestal los campesinos ponen dinero de sus bolsillos, aunque los ingenieros que supervisan sus trabajos son autorizados por SEMARNAT. El trabajo que realizan es pagado por quienes hoy son acusados de talamontes, aun y cuando son supervisados en todo momento.

Además, el gobierno ha dejado de donar las plantas para la reforestación y ahora son los habitantes del lugar quienes tienen que correr con los gastos para su adquisición y conservación.

Pero la economía no fluye nada más alrededor de los árboles maderables. Los campesinos también producen leche, carne en baja escala, algunas frutas, verduras y de igual forma se aprovecha el turismo.

De ahí que sea totalmente necesario que los caminos sean reparados a la brevedad, sobre todo cuando la actual temporada de lluvia complica incluso más el tránsito de sus casas a los sitios donde pueden comercializar sus productos, entre otros, las centrales de abasto de Xalapa y Puebla.

“Es como la última alternativa que nos dejan porque para todos los productos que movemos se requiere una estructura de caminos buenos y accesibles que economicen los costos del transporte, porque en las condiciones que está el camino imagínese cuanto sale un flete de aquí a Las Vigas, por lo menos”.

Los pobladores enfatizan que no se trata solamente de un tema que tiene que ver con la economía, sino también con la salud de los habitantes, pues las condiciones del camino no solo implican altos costos, sino retrasos en caso de alguna emergencia o lesiones mayores durante el traslado.

“De un enfermo, una camioneta cobra 500 pesos de aquí a Las Vigas como flete y eso si es amigo; si estuviera bueno -el camino- te cobra menos, pero no quieren ni hacer el viaje”, detallan.

Agregaron que en la pasada temporada de incendios forestales el paso para los vehículos de bomberos también se complicó, lo que supuso una afectación mayor a los bosques, pues de haber estado en buenas condiciones, la respuesta habría sido más rápida.

“Complica todo el transporte de todo lo que se mueve aquí”, reiteran.

Los campesinos se dijeron cansados de que, desde hace 40 años, se organizan en comités comunitarios para tratar de remediar las condiciones de los caminos, juntando hasta 50 mil pesos para material y mano de obra, pero al cabo de 4 meses, están nuevamente destrozados.

Sobre el tema, el gobernador Cuitláhuac García Jiménez nuevamente asoció la presión social a la oposición y a un asunto político.

“La persona quien encabeza fue un excandidato del PAN, bueno intentó ser candidato del PAN en Coatepec y las denuncias van dirigidas a esos cabecillas porque están haciendo un manejo político electorero”, anunció.

Dijo que nada tienen que ver las protestas y las acciones tomadas por los manifestantes, indicando que deberán ser los municipios los encargados de atender la problemática con medidas como la denuncia que ya versa sobre los inconformes.

“CMAS SURTE AGUAS NEGRAS”

Los pobladores han afirmado también que si CMAS usa otras fuentes de obtención del líquido, como anunció en un comunicado el lunes pasado, se tratarán de aguas negras. 

Y es que este 11 de octubre la Comisión informó que se cuenta con una estrategia operativa adecuada para no dejar sin el vital líquido a la población xalapeña.

Incluso, CMAS minimizó la afectación que el cierre del acueducto representa, indicando que tan solo es del 15 por ciento tomando en cuenta todo el suministro que llega a la ciudad.

“Para la zona alta del cerro de Macuiltépetl se tienen activadas dos bombas de la planta potabilizadora de apoyo para mitigar la afectación.

“Disponemos de camiones cisterna en caso de ser necesario que pueden solicitar a través de nuestro call center”, refirió la Comisión, que además enfatizó que las denuncias se interpusieron en la Fiscalía General del Estado (FGE).

Las Vigas de Ramírez es un municipio de 20 mil 300 habitantes con corte al 2020, de acuerdo con información en manos del propio gobierno estatal, tomada del Censo de Población y Vivienda del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Información (INEGI).

Más del 50 por ciento de la población vive en las zonas rurales del municipio y en 2015 se encontró que el 76 por ciento estaba en condiciones de pobreza.

De ese porcentaje, 15.9 por ciento padecía la pobreza extrema, además de que había 18.1 por ciento de la población en vulneración por carencia social.

Por cuanto hace a otras condiciones socioeconómicas, los datos refieren que el 2.7 de las viviendas particulares censadas -5 mil 70- son de piso de tierra.

Cerca del 10 por ciento no tienen agua entubada; 13.5 por ciento carecen de drenaje y apenas el 19.4 por ciento tienen acceso a una conectividad de internet.

Las Vigas es un municipio con grado de marginación medio, con un índice de 53.8 por ciento.

ys