Xalapa, Ver. - Las diferencias políticas entre los alcaldes que concluyeron su periodo en 2021 y los que está en funciones, limitó que se justificara de manera eficiente el gasto del presupuesto de ese año. 

La falta de claridad en el gasto tendrá un impacto en el monto del daño patrimonial que tasará el Órgano de Fiscalización Superior (Orfis), adelantó la Auditora General, Delia González Cobos.

El Órgano de Fiscalización Superior es el responsable de revisar, a través de auditorías, el gasto de los recursos públicos que se asigna cada año a los municipios, órganos autónomos, poder Legislativo, Ejecutivo y Judicial.

En el mes de septiembre, el Orfis entrega un informe del resultado de la revisión del gasto del presupuesto al Congreso local, que debe aprobar el manejo financiero de los entes fiscalizables.

González Cobos adelantó que están integrando el informe que presentará a los diputados locales el mes próximo de septiembre.

“Estamos trabajando en este momento en la solvatación de los pliegos y vamos en los tiempos justos para entregar como señala la ley”, planteó la funcionaria. 

Cuestionada por el proceso de solventación o justificación de las observaciones por el manejo de los recursos, reconoció que los alcaldes y los exalcaldes no se han comunicado, por lo que no se ha presentado la documentación necesaria.

“Hay una situación especial, porque no en todos los casos ha habido buena comunicación entre la autoridad saliente y la entrante, y eso ha dificultado el proceso de solventación”.

Ese hecho, dijo, va en detrimento de los recursos públicos, pues no hay transparencia en el manejo financiero de las administraciones, especialmente las municipales.

Lo que vemos es que pueda darse esa situación (un mayor daño patrimonial), por falta de comunicación entre las autoridades.

ys