Xalapa, Ver.- Solo cuatro meses después de anunciar el cierre, este viernes 10 de junio reabrió el emblemático Hotel Limón, ubicado a un costado de la Catedral Metropolitana de Xalapa.

Para reanudar sus funciones de hospedaje a los visitantes a la capital del estado, llevó una nueva administración que además “adecuó” el hotel que reabrió sus puertas a los visitantes a Xalapa.

El febrero pasado, se anunció que el inmueble dejaría de operar, luego de la crisis económica que generó la pandemia por el virus SARS CoV-2, y tras brindar servicio por más de 120 años en la capital del Estado.

Sin embargo, este viernes se colocó un letrero en su fachada, confirmando la reapertura para locales, nacionales y extranjeros.

De acuerdo con Adolfo Oubiña Amoedo, administrador del hotel, durante un mes se llevó a cabo el mantenimiento del espacio para poder ponerlo en marcha con todas las comodidades que los clientes requieren.

"Se están haciendo las adecuaciones necesarias, algo de pintura, pero manteniendo la esencia del hotel, continuará siendo económico, no podemos hacer grandes cambios en la infraestructura porque esa es una de sus características principales, lo que necesitaba el hotel era mantenimiento en las instalaciones básicas como gas, tuberías, servicio de agua potable, únicamente", expuso.

Además, se mantuvo a casi toda la plantilla laboral, pues lo único que se eliminó fue la lavandería, área que se consideraba obsoleta.

"Según vaya laborando el hotel se irá ampliando la plantilla, obviamente en ese momento como estamos abriendo no podemos tener mucho personal", expresó.

El costo de las habitaciones se redujo un poco, debido a que se reconoce que la economía actual no es favorable para varios sectores de la población. Actualmente, cada habitación va de los 200 a los 500 pesos, según el número de camas y huéspedes.

Cuándo se fundó el hotel

Este hotel fue fundado en 1894 por Manuel M. Limón como casa de huéspedes y “Teatro Limón”. Se usó como alojamiento, siendo uno de los hoteles con más tradición de Xalapa y, por ello, testigo de la propia historia de la ciudad.

Anteriormente, era una casa particular y funcionó como cuartel para las fuerzas francesas en 1862.

El espacio cuenta con 48 habitaciones privadas, individuales, dobles, matrimoniales y para grupos de hasta 5 personas. Cada una dispone de baño con agua fría y caliente, sistema de televisión, acceso a Internet, ventilador y servicio de limpieza diario.

FP