“Estoy entre emocionado y preocupado, por los tiempos”, dice Andrés Mora García, un médico egresado de la Universidad Veracruzana (UV) que fue aceptado por la Universidad de Harvard para estudiar una maestría en Investigación Clínica.

Andrés recibió la carta de aceptación el pasado domingo 1 de mayo, una fecha tardía para concursar en convocatorias para la obtención de becas con las que pueda pagar su estancia durante dos años en Cambridge, Massachusetts, en los Estados Unidos.

Preocupado por los gastos mensuales que tendrá en Cambridge, que ascienden a 80 mil pesos entre colegiaturas, la renta de un departamento, transporte y comida, Andrés inició trámites extemporáneos para la obtención de becas para pagar sus estudios y estancia en Harvard.

“No tengo ese dinero, digamos que lo que tengo ahorrado sería para un mes”, expresa.

Debido a que la carta de aceptación le llegó cuando las convocatorias para concursar por becas ya estaban cerradas y a que no cuenta con los recursos suficientes para pagar su estancia en Cambridge, Andrés tendrá que esperar un año más para ir a Harvard, un sueño que le nació en el segundo año de la carrera de Medicina.

“Dada la situación que tardaron ellos en darme la carta de aceptación, me ofrecieron que ingresara con la siguiente generación, en 2023”, comenta Andrés.

A partir de la noticia que le dio el personal de Harvard, Andrés afirma que buscará conseguir las becas que necesita para estudiar en la universidad estadunidense y que, de ser necesario, tramitará préstamos para pagar la maestría.

“He estado viendo ya algunos (préstamos) del Banco de México que, igual, la convocatoria ya se cerró, pero mandé un correo. Te dan un préstamo para pagarlo a partir de un año después de que egresas de la maestría”, menciona.

Un sueño que nació cuando estudiaba Medicina

Andrés recuerda que cuando cursaba el segundo año de la carrera en la Facultad de Medicina de la UV en el Campus Poza Rica, en 2014, una médico pozarrricense expuso a los alumnos la estancia que realizaba en ese momento estudiando una especialidad en Estados Unidos.

“Ahí me entró esa espinita de querer irme a Estados Unidos a estudiar”, indica el joven.

El primer paso que dio fue mejorar su nivel de inglés. Andrés aprovechó los dos semestres que se imparten del idioma en la Universidad Veracruzana y, además, incluyó la materia dentro de su horario un par de veces más para llegar a un nivel intermedio.

La ilusión de estudiar en el extranjero se mantuvo hasta hace dos años, cuando eligió Harvard como la universidad para estudiar una maestría, a causa de la recomendación del médico Mario Contreras, quien junto con su esposa estudió en el lugar.

Desde ese momento, Andrés publicó artículos científicos en revistas internacionales editadas en inglés, participó en concursos de investigación y en congresos, con la intención de ampliar su currículum para convertirse en un prospecto de estudiante para la Universidad de Harvard.

Aunque en 2020 intentó aplicar los exámenes necesarios para tener un lugar en la Maestría en Investigación Cínica que ofrece la universidad, el joven desistió debido a que por la pandemia de covid-19 se suspendió el otorgamiento de becas.

De acuerdo con colegas a los que consultó, Andrés necesita por lo menos 20 mil pesos mensuales para pagar la renta del lugar donde vivirá en Cambridge, Massachusetts, donde se encuentra la universidad. A eso se suma el pago de la inscripción, una cantidad de aproximadamente 80 mil pesos.

“Al año, de pura colegiatura son alrededor de un millón 700 mil pesos. Serían 140 mil pesos mensuales”, asegura.

A causa de la falta de recursos, fue que decidió aplicar a Harvard hasta la convocatoria que la universidad lanzó en septiembre de 2021. El joven esperaba que la carta de aceptación llegara alrededor de marzo para poder aspirar a becas.

Pese a que la carta de aceptación de Harvard llegó con retrasos, el médico se dice feliz y dispuesto a aprovechar la oportunidad, pues después de la maestría desea regresar a México para hacer labor social en Veracruz y sobre todo en Poza Rica.

“Si hay más estudiantes interesados, quiero apoyarlos para que se vayan y, más que nada, desarrollar proyectos de salud aquí en la zona donde nací”, comparte.

Forjado del esfuerzo, en Poza Rica

Andrés Mora García es originario de Poza Rica, un municipio ubicado en la zona norte de Veracruz, en donde estudió la carrera de medicina en la Universidad Veracruzana tras abandonar sus aspiraciones de estudiar una ingeniería.

Cuando planeaba iniciar la universidad, en 2011, el joven aspiraba a ser estudiante de ingeniería automotriz, una carrera que en ese entonces sólo encontró en Monterrey y en Puebla. Salir de Poza Rica era algo impensable, narra.

En ese momento sus padres también tenían la responsabilidad de apoyar con el bachillerato a su hermana Alejandra, quien actualmente tiene 25 años y estudia una maestría en Mercadotecnia, por lo que no quiso que sus estudios fueran una carga para su familia.

De acuerdo con el médico, quien actualmente se encuentra desempleado debido a que está concentrado en conseguir los recursos que necesita para su estancia en Cambridge, su madre, María del Consuelo, tiene una tienda de abarrotes y su padre, Andrés, es abogado. Es así como se mantienen en casa, dice.

Andrés relata que trabajó casi durante toda la universidad. En el primer año estudiaba de siete de la mañana a tres de la tarde y a partir de esa hora se iba a trabajar a un cine. Así, menciona, fue como logró pagar los gastos que salían de la carrera de Medicina hasta que egresó de la UV.

Cuando egresó de la Facultad de Medicina de la UV, continuó preparándose para su proyecto de maestría en Harvard, ahora con una estancia en el Centro de Investigaciones Cerebrales en Xalapa y posteriormente haciendo servicio social en el Instituto de Perinatología de la Ciudad de México desde mediados de 2018.

Debido a su desempeño obtuvo un contrato en el Instituto de Perinatología y comenzó de manera paralela la Maestría en Ciencias de la Salud en el Instituto Politécnico Nacional. En la Ciudad de México llegó a tener hasta tres trabajos para cubrir sus gastos de estudios, vivienda y transporte, asevera.

Andrés narra que cuando todo tomaba un curso favorable, abandonó la Ciudad de México en medio de la pandemia de covid-19 tras ser víctima de la inseguridad.

“Se metieron a robar a mi edificio, entonces pues obviamente entraron un montón de tipos con marros, nos robaron a todos. Bueno, yo fui de las personas que se resistieron, lo perdí todo por poner esa resistencia. Por defender mis cosas terminé con moretones”, describe.

El médico recuerda que hubo personas de la tercera edad que fueron golpeados y dejados sólo en ropa interior por los ladrones. Junto con otros habitantes del edificio trató de denunciar el hecho, pero fue amenazado, por lo que decidió volver a Poza Rica dejando su maestría y los trabajos con los que incluso ayudaba a su familia.

De acuerdo con Mora García, en ese entonces dejó sus trabajos como certificador de una empresa de servicios funerarios, en el Hospital Star Médica de la colonia Roma y en el Instituto de Perinatología de la Ciudad de México.

“Aunque renuncié de manera muy súbita donde trabajaba, quedé muy bien y me dijeron que, si en cualquier momento decidía regresar a la Ciudad de México, ahí tenía yo mi puesto”, dice Andrés, quien terminó por concentrarse en su ingreso a Harvard.

Harvard es una oportunidad muy grande para mí

Para Andrés Mora García, la carta de aceptación de Harvard representa una oportunidad muy grande para ampliar sus conocimientos en la investigación médica y, posteriormente, obtener un trabajo o realizar una especialidad médica en obstetricia en Estados Unidos.

“Primero que nada, mi prioridad sería dar estabilidad económica a mis papás y a mi hermana”, externa.

El médico pozarricense afirma que su ingreso a Harvard tiene un porcentaje de suerte y otro de esfuerzo, pues dice que su perseverancia por no quedarse a medio camino lo llevó a conseguir un objetivo que tenía desde hace casi ocho años.

Sabe que durante su estancia en Harvard tendrá que hacer sacrificios. Ir a Cambridge es un sí seguro, de eso no tiene dudas. No le importa endeudarse con préstamos con tal de conseguir su sueño.

 Ahora deberá ser paciente un año más, pero está consciente de que es una oportunidad para concursar por becas e irse más relajado a Estados Unidos.

FP