- Xalapa
Carmen vende caretas y cubrebocas durante vacunación en Xalapa
El plan nacional de vacunación ha permitido activar la economía informal de la capital del Estado. Luz del Carmen, encontró en los puestos de vacunación y algunos mercados sobreruedas una opción de ingresos al vender caretas y paraguas.
Este 11 de mayo acudió a la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información (USBI) a colocar un pequeño puesto informal. En días buenos, dice, la venta es de hasta mil 500 pesos.
Los maestros fueron los mejores clientes, asegura, pues muchos llegaban directo a buscar cubrebocas y caretas para cubrirse durante la espera para ser inoculados. Fue a los maestros con los que se retrasó el proceso de inoculación, por lo que buscaban la forma de protegerse del sol.
En el caso de los adultos mayores, y ahora las personas de 50 a 49 años, se acercan a preguntar, pero no muchos compran. Los precios de sus productos son de 70 (la careta) y 100 pesos (los paraguas).
“Los maestros si compraron un poquito más, pero ahorita con la tercera edad y cincuenta y más casi no” contó en entrevista con E-Consulta.
Mencionó que ella vio en el plan de vacunación una opción para apoyar en la economía familias, pues su esposo es vendedor de “chácharas” en mercados sobreruedas y ahora ambos acuden a los puestos de vacunación de la capital a vender.
Cada uno se apoya de un hijo que los acompaña, en ocasiones usan su celular para hacer la tarea pues todos están en edad escolar. El mayor tiene 13, el segundo 11 y la más pequeña 10.
Además de los puestos de vacunación, también acuden a espacios donde se organizan eventos masivos, “o a los mercados, ahí vamos a chacharear. Cuando nos va bien vendemos mil o mil 500, es lo más que llegamos a vender”.
La venta diaria, comenta, les permiten sacar lo de la comida de la familia de cinco integrantes.
Luz del Carmen adelantó que se mantendrá en la USBI está semana que se tiene proyectada la vacunación de personas de 50 a 59 años.
Al igual que Luz del Carmen en las inmediaciones de la USBI hay vendedores de volovanes, chicharrones y papas, además, de taxistas que apoyan en el traslado de las personas que acuden a vacunarse.