Contagiarse de covid-19 casi le costó la vida a la profesora Xóchilt Alemán Seseña, pero este mal no mermó su vocación como docente.

El pasado mes de enero toda su familia contrajo el virus. En entrevista, comenta que su padre murió a causa de la enfermedad que ocasiona el SARS-CoV-2.

Pero la profesora de Martínez de la Torre llegó desde las dos de la mañana a Xalapa, capital de Veracruz, para vacunarse y regresar pronto a las clases presenciales, ese es su objetivo profesional.

A sus 40 años comenta con orgullo que tiene 15 años de servicio y labora en el Jardín de Niños “Rafaela Vidal de Murillo”, en Martínez de la Torre.

JORNADA INTENSA 

Este lunes fueron miles los docentes, empleados administrativos y de intendencia quienes se trasladaron a la zona universitaria de Xalapa.

En cinco días el Gobierno Federal y el del Estado buscan aplicar 197 mil 430 dosis de la vacuna CanSino al personal educativo de Veracruz, teniendo como sedes Xalapa, Coatzacoalcos, Boca del Río, Tuxpan y Orizaba.

En la capital veracruzana se abrieron tres subsedes en las instalaciones de la Universidad Veracruzana (UV). Poco a poco se fueron congregando los trabajadores en el “Nido Halcón”; el Gimnasio UV y la Facultad de Ingeniería.

Llegaron en camiones alquilados, otros en camionetas o vehículos particulares hasta formar una multitud afuera de cada módulo, entre la que se encontraba Alemán Seseña.

“Estoy desde las dos de la mañana; salimos de nuestro lugar de origen a las 12 de la noche y aquí pasamos la noche”, relata.

El registro para recibir la vacuna fue sencillo y les informaron que para ser inmunizados únicamente debían presentar una identificación oficial y el CURP.

Ella asegura que todos los integrantes del sector deberían vacunarse para comenzar con la llamada “nueva normalidad”, a un año de ausentarse de los salones de clases, algo en lo que ella está de acuerdo para poder cumplir con su trabajo.

RETO ESTRESANTE 

Como profesora de un jardín de niños reconoce que las clases en línea han sido estresantes y difíciles durante la contingencia.

“Realmente fue difícil, por la situación más que nada emocional, manejarla con nuestros alumnos y nuestras clases en línea.

“Es algo estresante, pero se convierte en un reto para nosotros como docentes y bueno, aquí estamos pendientes. Primero nuestra ética profesional ante todo y tratamos de sacar lo más pronto posible la cuestión educativa”.

La maestra Xóchilt asegura que los padres que llevan a sus hijos al kínder “Rafaela Vidal de Murillo” se comprometieron, permitiéndole cumplir con su labor vía streaming.

“En mi caso con mi grupo hubo un total interés por parte de los padres, un apoyo también para nuestras actividades para que, con los niños, se diera la mejor intención, así como una comunicación constante con ellos también nos ayuda mucho a nuestro trabajo”, añade.

Sin embargo, apenas al comenzar este año la profesora tuvo que ausentarse por dos semanas de las clases virtuales. Ella enfermó del covid-19 y sufrió falta de oxigenación entre otros síntomas.

La experiencia “fue difícil”, ya que toda su familia contrajo el virus y Xóchilt sufrió una gran pérdida, según confiesa.

PERDIMOS A MI PAPÁ POR COVID

Xóchilt Alemán no viajó sola a Xalapa porque en su familia no es la única docente. Su hermana, prima y un sobrino comparten la profesión y también fueron llamados para aplicarles la vacuna.

Llevaron sillas plegables y aunque estaban preparadas con suéteres para el clima frío de la ciudad, durante este martes la temperatura llegó a los 24 grados Celsius.

El covid-19, reconocen, les cambió la forma de impartir su profesión y hace 3 meses enfermó a casi todos los integrantes de la familia Alemán.

La profesora dice que padeció la falta de oxigenación en la sangre, pero también fiebre, dolor de cabeza y estuvo en cama durante dos semanas.

“Fue una experiencia mala porque aparte de mí, mi familia toda se enfermó, mis hijas, mi esposo, mi madre, mis hermanas (…). Desafortunadamente perdimos a mi papá, por covid, en enero”, confiesa.

Desaprovechar la oportunidad de vacunarse no fue una opción para Xóchilt y su familia. Incluso su madre, quien es adulta mayor, también está vacunada.

Comenta que sus hijas estudian la preparatoria y otra cursa actualmente la primaria, de ahí que está convencida de que vacunarse es primordial para todos.

“Yo les pediría a quienes puedan que se vacunen, para evitar toda esta pandemia y que bueno, así poco a poco encontremos la normalidad en nuestra vida”, opina sin querer profundizar en su historia personal.

PRIMERA JORNADA

De acuerdo con el titular de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV), Zenyazen Escobar García, para la primera jornada de vacunación contra el coronavirus se tenía contemplado atender 43 mil 297 trabajadores y trabajadoras de la educación en las cinco sedes mencionadas.

En total, a la plataforma http://mivacuna.sev.gob.mx se registraron 167 mil 980 trabajadores y trabajadoras hasta este martes, de un total de 197 mil 430 que están en el padrón de la dependencia.

En las tres subsedes de Xalapa se esperaban a 12 mil 551 trabajadores; en Boca del Río a 9 mil 495; en Tuxpan a 9 mil 121; en Orizaba 6 mil 516; en Coatzacoalcos 5 mil 615, haciendo un total de 43 mil 297 beneficiados. 

Durante su recorrido de este martes, Escobar García destacó ante medios de comunicación que hay vacunas suficientes incluso para las escuelas particulares y aquellos docentes que son contratados por padres de familia o gobiernos municipales.

“Estamos contemplando aquellos maestros que también pagan las Sociedades de Padres de Familia, los maestros de inglés, de computación, los maestros de baile, todos los maestros que al final absorben los pagos, tanto los alcaldes como los padres de familia, los tenemos contemplados”, dijo el secretario.

La jornada concluyó cerca de las siete de la noche y en Xalapa no se reportaron incidentes, pese al traslado de miles de trabajadores.