La pandemia ha dejado a cerca de 13.2 millones de mexicanos desempleados; la población subempleada, la que declaró tener necesidad y disponibilidad para disponer más horas de trabajo que las que su ocupación actual le permite, representó el 13,9% del total de la ocupada, un nivel superior en 5,2 puntos porcentuales a la del mismo mes de 2020, según datos del INEGI.

Esta grave situación económica ha motivado que muchas personas opten por solicitar un préstamo personal para tener un respiro de sus gastos; sin embargo el préstamo es un compromiso financiero que tarde o temprano se tiene que liquidar.

De acuerdo con Coru.com, plataforma comparadora de servicios financieros, un préstamo puede ser de gran utilidad para administrar gastos imprevistos o salir de una emergencia económica, siempre y cuando la persona que lo solicite tenga en mente que los préstamos se tienen que saldar cuanto antes; de lo contrario, en lugar de ser un alivio financiero puede ser un verdadero problema.

Para que te des una idea que el problema no solicitar un crédito, sino pagarlo; la crisis de la covid-19 golpeó tanto a los mexicanos que la banca ya considera pérdidas de 60,000 millones de pesos en créditos incobrables y 47,000 millones de pesos están en cartera vencida, es decir, que están atrasados con al menos un mes.

Los préstamos en línea pueden ser una buena opción, con la facilidad de que es más fácil y menos engorroso que ir a una sucursal; muchos bancos o fintech cuentan con créditos disponibles en sus sitios web o apps,  y los préstamos están a un clic.

Sin embargo, de acuerdo con Coru.com antes de solicitarlo es importante considerar:

Revisar las finanzas:

Antes de pedir un préstamo se debe estar seguro de poder pagarlo

No pedir un préstamo para saldar otro:

Lo peor que se puede hacer para pagar una deuda es contraer otra. Si se tiene un adeudo difícil de pagar, lo mejor será acercarse a la institución a la que se debe y buscar la posibilidad de renogociar el saldo restante

Revisar los términos y condiciones:

Antes de aceptar un préstamo es importante revisar a detalle los términos y condiciones y tener claro cuánto se pagará, la periodicidad y las comisiones por retrasos. Estos deberán incluir la tasa de interés ordinaria expresada en términos anuales simples y el Costo Anual Total (CAT).

Usar un simulador de intereses:

Algunos bancos e instituciones financieras en línea permiten modificar la periodicidad y el monto a pagar de una deuda. Estos datos dependen de la capacidad de pago, pero hay que recordar que cuanto menor sea el pago, mayor será el plazo de la deuda

Comparar varias opciones:

 Antes de solicitar un préstamo se debe revisar las opciones que hay en el mercado; busca la que te dé más facilidades de pago y una menor tasa de interés

Ojo con los pagos chiquitos:

Algunos créditos pueden parecer atractivos porque los pagos son en montos pequeños, pero esto es porque se hacen por día o por semana, lo que a simple vista los hace parecer muy bajos; sin embargo, al sacar el pago mensual resultan no ser tan buena opción.

Antes de solicitar un crédito por internet, la Condusef te recomienda:

-Verificar la identidad y registro de la institución; es mucho más seguro acudir con instituciones debidamente autorizadas

-No dejarse engañar por la aparente rapidez para el otorgamiento del crédito que ofrecen algunas empresas

-No proporcionar datos personales o datos de tarjetas de crédito o débito si no se está seguro de que sea una empresa seria

-En caso de ser víctima de un fraude, se debe acudir a la Condusef para poner una queja

VENTAJAS

Se pueden obtener desde cualquier lugar en donde te encuentres.

Rapidez del trámite.

Las tasas de interés que manejan suelen ser menores a las de los bancos tradicionales.

Las plataformas te ofrecen la facilidad de contar con un simulador para que te hagas una idea sobre cuánto tendrás que pagar mes con mes, de esta manera no será ninguna sorpresa.