José Irwin Estrada Cárdenas fue visto por última vez el pasado lunes 5 de abril antes de que se dirigiera a un domicilio del fraccionamiento Palmeras en el municipio de Orizaba para entrevistarse con un cliente.

El hombre, quien era abogado, abordó su automóvil Nissan March SR color rojo, con placas de circulación YKW 61-26, rumbo a la entrevista con su cliente, sin embargo, jamás volvió a saberse de su paradero.

A las pocas horas de su desaparición, sus familiares comenzaron una campaña de búsqueda en redes sociales, a la que se sumó pronto el Colectivo de Familiares de Desaparecidos Orizaba-Córdoba a través de un cartel con su fotografía.

Luego de que la familia del abogado, de 30 años, denunció su desaparición, la Comisión Estatal de Búsqueda también una ficha para coadyuvar en la obtención de datos que pudieran revelar su ubicación.

En la ficha de búsqueda se reporta que José Irwin tenía ojos de color café oscuro, piel blanca, cabello negro, ondulado y corto, y como señas particulares un lugar en la nariz y tatuajes en la espalda.

Finalmente, su cuerpo fue hallado ocho días después de su desaparición en una fosa clandestina de la comunidad de Tepoxtlán, en el municipio de Mariano Escobedo. Junto a él, también fue enterrado Isaac Olvera Hernández, de 54 años, quien era taxista.

La búsqueda en dichos predios comenzó el pasado 7 de abril, luego de que una persona reportó a través de una llamada anónima denunció que en la comunidad se detectó tierra removida en un campo de cultivo, por lo que la zona fue acordonada por autoridades policíacas.

De acuerdo con las autoridades, fue imposible ingresar al predio ese mismo día debido a que era propiedad privada. Tras conseguir una orden judicial, los restos fueron exhumados el martes 13 de abril.

La versión fue rebatida por integrantes del Colectivo de Familiares de Desaparecidos Orizaba-Córdoba, quienes indicaron que el predio era un espacio abierto.