Veracruz, Ver.- Ciudadanos de la zona conurbada Veracruz, Boca del Río y Medellín se manifestaron esta tarde en la avenida Independencia del Centro Histórico, en contra de las empresas Grupo Metropolitano de Agua y Saneamiento (Grupo MAS) y la compañía de Agua de Boca del Río (CAB), los manifestantes denuncian cobros excesivos en los recibos además de que aseguraron que el servicio es de mala calidad e ineficiente. 

Hace dos años Reina Martínez pagaba alrededor de dos mil pesos por el servicio de agua, pero este año el recibo fue de siete mil pesos, más del triple e incluso más que sus ingresos.

Reina vive en la colonia 21 de abril una zona de clase media, para pagar el recibo de agua y que no le cortaran el servicio tuvo que meterse a trabajar de mesera en un restaurante así fue como consiguió el dinero suficiente para no quedarse sin agua, cometa en entrevista durante la manifestación.

Con botellas en mano y fotografías que exponen la mala calidad del agua es como salieron a manifestarse decenas de usuarios quienes piden que paren estos abusos por parte de dichas empresas.

“Nos están vendiendo un agua que está muy sucia y algunos les cobran bien caro y a otros ni siquiera les llega el agua,” expresó Ernesto Remigio Treviño ciudadano inconforme.

Debido a la pésima calidad del agua algunos de los usuarios aseguraron haber desencadenado alergias en la piel tales como rasquiña y erupciones por bañarse con agua contaminada.

Oliver Olmos Cabrea presidente de la asociación civil México Transparente e integrante del Movimiento Civil Independiente, aseguró que ya llevan 800 quejas ante la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) y 128 juicios de amparos. 

También señaló que llevan más de 700 firmas de los ciudadanos inconformes que serán presentadas ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en México.

Dijo que ya están iniciando a través del Tribunal Federal de Justicia Administrativa una demanda por juicios de lesividad contra estas dos empresas. 

El dirigente recalcó que ya se tiene registrado que más del 60 por ciento de las plantas de tratamiento no están operando y que el agua que están extrayendo de los pozos no está siendo potabilizada.

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