Veracruz, Ver.- El exbeisbolista Narciso Elvira contaba con escoltas que le habían proporcionado las autoridades, hasta hace unos años, cuando le fueron retiradas esas medidas debido a que él ya no los requirió.

Lo anterior lo reveló su hermano, Abraham, durante el velorio que le realizan en la congregación El Cocuite, del municipio de Tlalixcoyan, en la periferia del Puerto de Veracruz.

El martes en la tarde, el exjugador de Grandes Ligas y su hijo de 20 años fueron asesinados por un comando armado en la localidad de Paso del Toro, en el municipio de Medellín de Bravo.

En el 2015, Narciso fue privado de su libertad cuando viajaba de Tlalixcoyan a Hueyapan de Ocampo, en el sur de la entidad veracruzana. la Fiscalía General del Estado lo liberó casi un mes después y detuvo a todos los presuntos responsables.

“La seguridad la tuvo dos años después que sufrió el secuestro, después se sintió relajado, pues tranquilo, aquí, conocemos a todos los de la congregación y pensó y dijo que no era necesario”, contó su hermano.

Narciso estaba dedicado por completo a la siembra de caña de azúcar, la cual trabajaba en su rancho, junto a sus empleados, de 6:00 de la mañana a las 17:00 horas.

Los fines de semana jugaba junto a su hijo en el equipo del pueblo “Los Diablos Rojos”, ambos eran queridos por los pobladores debido a que ayudó a fundar un campo de beisbol con medidas profesionales.

Su hermano exigió justicia al gobierno de Cuitláhuac García Jiménez y a la Fiscal General, Verónica Hernández; hasta ahora, ninguno de los dos se ha comunicado con la familia para brindarles ayuda.

“Pedir, a lo mejor sería demasiado, yo creo que es parte de la obligación, tener más seguridad para todos los ciudadanos”, dijo Abraham.

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