Veracruz, Ver.- Entre cercas vencidas y toldos viejos es como subsisten las más de 45 especies animales del Parque Zoológico Miguel A. de Quevedo.

Desde la entrada al parque se nota la ausencia de atenciones y cuidados al lugar donde un buen número de fauna silvestre cohabita en cautiverio, pues no ha sido pintada por lo menos desde hace tres años.

Una vez dentro de las instalaciones, el silencio se deja venir, no hay nadie caminando por los senderos. Tan solo un par de jóvenes que realizan prácticas profesionales en el parque.

Los chicos se toman fotos con lo que parece una pitón amarillo, ellos se turnan al animal y el teléfono celular para revisar las fotografías.

Para el resguardo de estos animales, el ayuntamiento de Veracruz únicamente tiene a un médico veterinario, cuatro personas en el área administrativa, tres en jardinería, tres guarda animales, dos personas a cargo de su nutrición, una para mantenimiento y tres vigilantes a cargo de la seguridad de casi 4.7 hectáreas donde se encuentra el parque.

Estas 4.7 hectáreas están sobre un médano donde está una laguna tipo Ramsar al borde de la sequía, un trabajador del parque comentó para E-Consulta Veracruz que años atrás era posible ver lanchas con pedales para familias.

A un costado de la laguna, había asientos y jardineras para que los visitantes pudieran almorzar, sin embargo, el área está totalmente inundada y lo único que abunda es la humedad donde una infinidad de mosquitos se siguen multiplicando, pues el ayuntamiento tampoco fumiga y no solo eso, desde hace un mes, tampoco han recolectado la basura del parque que, a la fecha, se encuentra amontonada a un costado de la laguna.

Las instalaciones cumplen con la ley de protección a los animales para el Estado de Veracruz de Ignacio de la Llave y sus reformas de 2018 que manda cumplir con las necesidades de salud, de comportamiento y fisiológicas frente a cambios en su ambiente impuestas por el ser humano, no obstante, la misma ley ha sido criticada por grupos ambientalistas por no garantizar el desarrollo natural de la vida silvestre.

Hay que recalcar que desde hace más de nueve años, una de las bardas perimetrales está colapsada y hasta el momento, no hay fecha para su reconstrucción.

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MIGUEL A. DE QUEVEDO Y DECIDE VERACRUZ

Durante los primeros meses de la administración del alcalde Fernando Yunes Márquez reconoció el deterioro en el zoológico y prometió cambiar la situación.

Para hacerlo convocó a una consulta ciudadana y lanzó la plataforma Decide Veracruz.

La propuesta del edil fue convertir al zoológico en un espacio para la educación y cultura del cuidado del medio ambiente, la transformación se haría con las propuestas ciudadanas a través de seis fases.

Se recibieron 30 propuestas ciudadanas, elaboradas por grupos ambientalistas, entidades académicas y especialistas en vida silvestre.

Entre las iniciativas se propuso la reubicación del sitio, la transformación en jardín botánico, el uso del lugar como hogar temporal de especies maltratadas, un sitio para impartir talleres y cursos de educación ambiental, convertirlo simplemente en parque recreativo e incluso una remodelación integral.

Sin embargo, hasta ahora se desconoce qué propuesta fue la más votada y, al mismo tiempo, la más viable para las finanzas municipales.

En la plataforma se establecieron dos fechas para el lanzamiento de la plataforma y el debate de ideas, la primera incluyó el 17 de abril del 2018 y la segunda el 25 de septiembre del mismo año.

La tercera fase consistía en encuentros presenciales que se llevaron a cabo entre el 26 de septiembre y 17 de octubre del año pasado, para posteriormente celebrar la cuarta fase de Presentación y votación de propuestas, terminado el 12 de diciembre del 2018.

Las últimas dos fases continúan estancadas, la quinta, "Análisis y valoración de respuestas" finalizo el 28 de diciembre del año pasado, y no hay forma que avance a de "Presentación de resultados" que se programó para el 4 de enero de este año.

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EL PARQUE DE LA INFANCIA VERACRUZANA

Con 53 años en funcionamiento, el Parque Miguel A. de Quevedo ha servido de albergue de distintos mamíferos, aves y reptiles, el nombre que recibe es precisamente por quien lo fundó.

Hace muchos años, el parque también conocido como "Viveros" era uno de los principales atractivos turísticos del Estado a nivel nacional que con el tiempo fue quedando en el olvido por las autoridades que se encargaban del inmueble.

En algún momento de la historia del parque, se perdió el control de su fauna pues los animales comenzaron a reproducirse sin mayor vigilancia, además de que los directivos aceptaban cualquier donación de animales, cuenta un trabajador con muchos años en el lugar.

"Tenía ganas de liberar a todos los animalitos, la verdad, se sentía súper triste", contó Joanna Cuadros, una visitante reciente del zoológico.

"Cuando era niña, incluso me tocó subirme al trenecito y tocar a los Xoloitzcuintle, es muy desafortunado esto."

El Parque se encuentra en la calle Campesinos esquina Simón Bolívar en la ciudad Veracruz, el costo de la entrada es de 15 pesos para adultos, 10 para niños y adultos de la tercera edad.

Actualmente, pese a su abandono, es uno de los últimos pulmones naturales en medio de la mancha urbana de la ciudad de Veracruz, que recibió a familias veracruzanas por varias generaciones.