Veracruz, Ver.- Por horas, operadores de pipas esperan afuera de la terminal de almacenamiento y despacho de Petróleos Mexicanos (Pemex), ubicada al norte de la ciudad de Veracruz.

Su misión es cargar sus tanques de 62 mil litros para abastecer de gasolina a ciudades del centro del país como Querétaro, Toluca, León y CDMX, que sufren escasez debido al programa de combate al huachicol, implementado por el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador.

El estacionamiento está lleno de autotanques, todos son propiedad de empresas privadas dedicadas al autotransporte de materiales peligrosos, como lo es el combustible.

Las compañías que predominan son ATM, con base en la ciudad de Córdoba; Royal, ubicada en la carretera Costera del Golfo; Autotanques Nieto, con sede en Coatzacoalcos; Transportes Marva, del puerto jarocho.

Otras que prestan el servicio son Transportes Promotores de Servicios, de la ciudad de Salamanca y Combustibles Maldonado y Olvera, de Tlaxcala.

El senador de la República, Julen Rementería del Puerto señaló en entrevista que el pago de esos fletes será millonario y más costoso que la conducción a través de los ductos.

Aunque no ofreció cifras exactas, debido a que depende de los kilómetros y otras variantes como los insumos y viáticos del operador, su equipo estima que transportar gasolina por buques sale dos veces más caro que en ductos.

Hacerlo por un carro tanque es seis veces más elevado que la primera opción y por medio de auto tanque (tráiler con remolque), es 14 veces más que por un ducto.

El senador de Veracruz, en tribuna, exigió a la federación que cuanto antes dé a conocer cuánto pagará el gobierno de la República por la distribución de la gasolina por esos medios.

La Silla Rota consultó a empresarios transportistas de materiales peligrosos ubicados en los alrededores del Puerto de Veracruz para tener un cálculo en pesos de sus precios.

Pidiendo reserva de sus nombres, para evitar conflicto en los contratos que tienen con Pemex, estimaron que, si una de sus unidades sale de Veracruz rumbo a Toluca, por ejemplo, cobrarían unos 73 mil 80 pesos, con IVA, con una carga de 60 mil a 63 mil litros de combustible.

"Todo el tiempo estamos en riesgo, amigo. La neta, todo el tiempo estamos en riesgo y sí, posiblemente es lo que va a pasar (asaltos), como ya no pueden pegarle al tubo, pues van a pegarle a la carretera. Ojalá que no pase nada. De que hay temor, para que te voy a decir que no, si, sí", dijo José Elías Salazar Baltazar, uno de los tantos conductores que esperan turno para cargar en Veracruz.

Al ser cuestionado si confía en el acompañamiento de la Policía Federal, mencionó que "voy acompañado por el de allá arriba" -en referencia a Dios-, pues los uniformados lo escoltan hasta maltrata, en la frontera con Puebla, de ahí, van a su suerte.

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