Boca del Río, Ver. - Entre porras y gritos de ¡Gobernador! Concluyó el primer debate de candidatos a la gubernatura del estado de Veracruz, organizado por el Organismo Público Local Electoral (OPLE), en las instalaciones del World Tared Center de Boca del Río.

Cerca de las 19:00 horas, empezaron a llegar los candidatos, el primero fue el de la coalición "Por un Veracruz Mejor", José Yunes Zorrilla, que llegó acompañado de la exdirigente nacional del PRI, Beatriz Paredes.

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Por el Partido Verde Ecologista de México acudió Carlos Marcelo Ruiz, quien estaba con la candidata por Pánuco, Octavia Ortega Arteaga. Ella negó que el audio que circula en redes sociales, con Javier Duarte de Ochoa sea veraz.

La segunda en arribar fue la candidata, July Sheridan, del Partido Nueva Alianza (PANAL), apoyada por decenas de maestros que la acompañaron con porras.

Cuitláhuac García Jiménez, de la coalición Juntos Haremos Historia, llegó acompañado de los candidatos de Morena, menos el del Senado, Ricardo Ahued, luego que en la mañana colgaran mantas en su contra por toda la ciudad de Veracruz.

El último, fue Miguel Ángel Yunes Márquez, de la alianza Por Veracruz al Frente, secundado por el Secretario General del Comité Ejecutivo del PAN, Marcelo Torres.

Tras varios minutos en maquillaje, a las 20:00 horas arrancó el debate en el que imperaron los ataques entre el PAN, Morena y el PANAL, sólo el PRI se mantuvo al margen de la discusión.

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El primero en subirse al ring fue el panista al señalar que el abanderado morenista no puede hablar de administración pues nunca lo ha hecho, menos porque todavía vive con sus padres.

En respuesta, Cuitláhuac mostró una fotografía en la que se ve a Yunes dándole la mano al exgobernador, Javier Duarte de Ochoa, dejando ver que nunca hubo oposición en contra del priista, como pregona Acción Nacional.

Fue entonces que hizo su aparición la del PANAL, July Sheridan, acusando al de Morena de tener más de 13 propiedades en diferentes partes del estado y no sólo un terreno rural como lo presume.

De inmediato, el de izquierda lo rechazó diciendo que si alguien lo comprueba les regala las casas o predios que según tiene de manera anónima.

De nuevo, la aliancista arremetió contra el de Morena señalando que, si tiene otra casa con valor millonario ubicada en el Fraccionamiento Costa de Oro, de Boca del Río.

En su intervención, Miguel Ángel Yunes le regaló una foto suya, enmarcada, a Cuitláhuac, para que deje de andar enseñando siempre la misma y tenga una actualizada.

El de Morena afirmó que el junior no hará un buen trabajo, pues su padre, el actual gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares, no ha podido poner solución a los problemas.

El del Frente por Veracruz sacó una lámina en la que muestra la cero productividad de García Jiménez durante su paso como diputado federal.

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Por su parte, de nuevo Sheridan atacó al de Morena diciendo que no puede hablar de abatir la inseguridad cuando siempre ha confrontado a los policías, como prueba mostró una fotografía en la que se ve al candidato jaloneándose con un grupo de granaderos.

El morenista contestó que los que no pueden hablar de inseguridad son los del PAN pues el actual titular de la Secretaría de Seguridad Pública del estado, Jaime Téllez Marié, es acusado por ser interlocutor con el crimen organizado.

Hasta entonces, el del PRI, José Yunes Zorrilla, había tenido una participación discreta, hablando de sus propuestas sin entrar a la discusión entre los otros tres contendientes.

El momento más álgido del debate fue cuando la del PANAL aseguró que Cuitláhuac García no ostenta ni un postgrado en el extranjero como lo pregona.

Como prueba, le mostró unas láminas con frases en alemán, retando al candidato a leerlas en español, no lo hizo, sólo echó unas sonrisas, con el rostro enrojecido.

Tras ese incidente, los ataques entre los tres cesaron y el debate entró en el terreno de José Yunes Zorrilla, el de las propuestas, aunque ya estaba por terminar.

Al final, los tres candidatos salieron por las puertas principales, sin saludarse caminaron a la puerta secundados por decenas de sus militantes quienes iban coreando porras y gritos de apoyo.