Veracruz, Ver. Durante las campañas electorales del 2016, el entonces candidato del PAN-PRD, Miguel Ángel Yunes Linares, prometió ser implacable con los excolaboradores y cercanos de su antecesor, Javier Duarte de Ochoa, algo que no cumplió, por el contrario, en la actualidad, muchos son sus aliados y sus cacicazgos regionales podrían darle la sucesión a su hijo, Miguel Ángel Yunes Márquez.

En los casi 17 meses de gobierno (de los dos años que dura), el panista ha dedicado gran parte de su administración a tejer una red de alianzas con personajes de todos los partidos que, en elecciones pasadas, redituaban votos para el PRI y el Partido Verde.

Su intención es lograr bonos para las elecciones del 1 de julio en regiones apartadas, rurales, en las que el candidato de la coalición Por Veracruz al Frente, Miguel Ángel Yunes Márquez, tendría pocas posibilidades de ganar.

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Los Tuxtlas

Por ejemplo, en la región de los Tuxtlas, que abarca los municipios de San Andrés, Santiago y Catemaco, Yunes Linares ha pactado con dos figuras poderdantes en la política de esa región.

El diputado local del Partido Nueva Alianza, Vicente Benítez, fue el operador financiero de su amigo, el exgobernador, Javier Duarte de Ochoa, que en la actualidad está detenido en un penal de la Ciudad de México. 

Tras la aprehensión del cordobés salieron a la luz pública sus propiedades en Puerto Rico, pese a esto y a que le atribuyen el envío de 25 millones de pesos en efectivo al Estado de México en el 2012, Benítez nunca ha tenido un proceso legal en su contra, contrario a eso, se le ha visto en fotografías cercano al mandatario, como uno de sus aliados en el Congreso del Estado.

Otro es Octavio Pérez Garay, alcalde del municipio de San Andrés Tuxtla; en la legislatura pasada fue diputado por el Partido Verde Ecologista de México, proviene de una familia de reconocidos priistas, sus padres muy cercanos al exgobernador, Fidel Herrera Beltrán.

Sin embargo, al ganar la alcaldía por la vía independiente, en el 2017, ahora opera a favor de Yunes Linares, incluso evidenciado la supuesta entrega de apoyos de parte de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDEESOL), por el gobierno federal para condicionar el voto a favor del Revolucionario Institucional.

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Las Choapas 

En el sur del estado, casi en la frontera con Tabasco, el gobernador panista se hizo de dos aliados en la región, la primera es la diputada local independiente, Eva Cadena.

Ella, a pesar de que nos ser parte del círculo cercano a Duarte de Ochoa, pertenecía a la radical del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), hasta que difundieron una serie de videos en los que recibía dinero para la supuesta campaña del candidato a la República, Andrés Manuel López Obrador.

Desde entonces, cada que hay un conflicto político entre el tabasqueño y Yunes, ella sale al quite, lo que a muchos le ha llevado a sospechar una especie de pacto entre la legisladora y el mandatario estatal.

Otro de sus aliados en esa zona es el exalcalde de Las Choapas, Renato Tronco, un político que ejerce el cacicazgo en el sur al sustentar su fuerza política en la toma de carreteras con grupos de choque.

A pesar de que fue acusado de asesinar a un regidor durante su mandato como presidente municipal, le fueron retirados los cargos y ahora es candidato a diputado por la alianza PAN-PRD, misma que encabeza al hijo del gobernador, Miguel Ángel Yunes Márquez.

Córdoba 

En la ciudad de Córdoba, Yunes Linares logró que el exdiputado del PRI y del Partido Verde, Tomás López Landero, se sume a su red de aliados, que operarían el 1 de julio para su hijo.

El empresario cordobés es hermano de la alcaldesa, Lety López Landero, quien también salió de las filas del PRI pues era parte de la agrupación Antorcha Campesina.

Tomás López, todavía como parte del priismo, ofreció una cena en su casa para el candidato a la presidencia de la República de la coalición Por México al Frente, Ricardo Anaya Cortés, durante su pasada gira en el estado.

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Martínez de la Torre

En la región citrícola de Martínez de la Torre, el mandatario panista formó una alianza con el ahora candidato a diputado federal por el PAN-PRD-Movimiento Ciudadano, Eduardo Sánchez Macías.

El empresario de medios de comunicación mantiene gran influencia en la zona central del estado y parte del norte, lo que le sumaría votos al candidato a la gubernatura.

En años anteriores, detractores de la familia Sánchez Macías, los señalaron de mantener un vínculo sanguíneo con Karime Macías, esposa del exgobernador Javier Duarte de Ochoa.

Papantla 

Otro expriista que se sumó a las filas del PAN, en estos últimos meses, es el diputado local, Basilio Picazo Pérez. El ganó el cargo bajo las siglas del PRI, pero una vez que Yunes tomó protesta el 1 de diciembre del 2016, decidió renunciar a su bancada para unirse a los panistas.

Como ex alcalde del municipio de Coyutla, guarda un poderío cacical en la región papanteca, incluso, los cargos de elección popular pasan de mano en mano entre sus familiares.

En el 2005, fue acusado como autor intelectual del asesinato de un exsindico, aunque quedó absuelto y ahora opera en su zona en favor de Yunes Márquez.

Frontera con Tamaulipas

Tal vez el caso más sonado es el de la familia García-Escalante, todos cercanos al exgobernador Javier Duarte de Ochoa y ahora trabajando de lleno en favor del PAN y sus aliados.

El patriarca de la familia, Ricardo García Guzmán, fue controlador del gobierno de Veracruz en el sexenio pasado, pero, pese a los malos estados financieros encontrados por la administración actual, no ha sido tocado por la ley.

Su hijo, Rodrigo García Escalante, llegó como diputado local del Verde Ecologista, pero apenas ganó Yunes Linares la gubernatura, renunció para sumarse a la bancada del PAN.

Su otro hijo, Ricardo, era alcalde de Pánuco y en la actualidad busca una diputación federal por ese distrito, que hace frontera con Tampico, en Tamaulipas.

Todos guardan fuerte influencia en la región y podrían sumarle cientos de votos a la campaña de Miguel Ángel Yunes Márquez, en las elecciones que están por venir, el 1 de julio.