Xalapa.-El brujo mayor Enrique Marthen Berdón “El ahijado”, inició al igual que cada primer viernes de marzo, las celebraciones que protagonizan hechiceros, adivinos y curanderos en Catemaco, Veracruz, lugar reconocido por la práctica de brujería y herbolaria.

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Los eventos comienzan desde la madrugada con la llamada misa negra, donde se rumora los brujos negros renuevan su pacto con el Señor del Encanto, “El diablo”; mientras los brujos blancos practican rituales de purificación y limpias para retirar “lo negro que han retenido sus clientes”.

Para la celebración de este año, se degolló un chivo y fueron sacrificados diecisiete gallos. Su sangre se utilizó para ratificar mencionado pacto, en el cual los asistentes aprovecharon para pedir desde salud hasta el daño contra otras personas.

El origen de la celebración se remonta a la época de los Olmecas, quienes con el equinoccio de primavera comenzaban su año.