Una jueza federal negó suspender las medidas de seguridad tomadas por PGR para vigilar la prisión domiciliaria de Elba Esther Gordillo, entre las que se encuentra un monitoreo remoto a través de una tobillera electrónica.

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Rosa María Cervantes Mejía, Jueza Décimo Segundo de Distrito en Amparo Penal en la Ciudad de México, resolvió rechazar la suspensión de las medidas, aunque envió el caso a Alejandro Caballero Vértiz, juez responsable del juicio y quien este sábado podría emitir un acuerdo con su determinación, de acuerdo a información de Reforma.

"La juez dijo que no puede conceder la suspensión porque las medidas de seguridad ya son actos consumados, sin embargo, dado que se trata de un tema que afecta salud, ordenó dar vista al juez de la causa para que sea él quien se pronuncie", comentó Marco Antonio del Toro, abogado de Gordillo.

La maestra interpuso el amparo 1076/2017 el 15 de diciembre contra las reglas de la prisión domiciliaria que le concedieron en su departamento de la calle Galileo, en Polanco.

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El juez Caballero ordenó montar una vigilancia física permanente de agentes de la Policía Federal Ministerial en el inmueble y colocarle un brazalete electrónico, así como la prohibición absoluta de salir de su departamento.

Además, ordenó a la maestra a entregar al juzgado el pasaporte, visas y salvoconductos de ingreso a otros países. También tiene un régimen de visitas controlado en el que sólo podrán visitarla abogados, familiares y doctores acreditados ante la PGR.

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Gordillo tampoco tiene acceso a computadora o televisión, mientras que sólo puede llamar a personas con previa autorización.

La Silla Rota con información de Reforma