Luego de un receso, el Tribunal Quinto de Sentencia Penal de Guatemala ordenó que el exgobernador de Veracruz, Javier Duarte, sea entregado inmediatamente a las autoridades mexicanas.

Previamente, el exgobernador, en la Torre de Tribunales de Guatemala, se allanó este martes al proceso de extradición a México, aunque aseguró no cometió los delitos que se le imputan por delincuencia organizada y lavado de dinero.

Ahora se hará un acuerdo entre secretarías de Relaciones Exteriores de México y Guatemala para poder trasladar al veracruzano a suelo mexicano. En la audiencia se pidió un receso de cerca de hora y media para realizar los trámites necesarios.

"He decidido allanarme al proceso de la solicitud formal de extradición presentada por el Gobierno de México con relación a los delitos federales de operaciones con recursos de procedencia ilícita y delincuencia organizada, ya que no cometí tales delitos y es mi deseo así acreditarlo ante el Poder Judicial de la Federación de mi país", lanzó.

La defensa del exgobernador veracruzano aseguró que existe una persecución política contra su cliente.

"Duarte, como ex funcionario, tiene una rivalidad y persecución política, quieren darle el matiz de desviar fondos", afirmó el litigante.

Asimismo, su defensa resaltó que hay vicios legales en la orden de aprehensión contra su cliente.

Por su parte, Duarte respondió a una extensa lista de acusaciones federales en su contra. Sobre una de las pruebas que se le leyeron, aseguró en tono enojado que existió una confusión y lanzó: "no soy ejidatario, no pienso ser ejidatario, no voy a ser ejidatario, por lo que la prueba está viciada".

También afirmó que en ninguna de las pruebas se mencionan nombres de sus familiares directos.

La audiencia dio inicio con una hora y media de retraso, cerca de las 11:00 horas de este martes.

Con información de La Silla Rota

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